Alarmado se encuentra el gremio ganadero ante los innumerables casos de hurtos de animales que se vienen presentando a lo largo y ancho del territorio nacional. Las modalidades más frecuentes, el carneo y el robo en lotes.   Con más frecuencia, los ganaderos de la mayoría de regiones del país son víctimas de una problemática que empeora con el paso del tiempo y sobre la cual no se ofrecen soluciones a la vista.   Miembros del sector pecuario de la Costa, el Centro, los llanos Orientales, entre otras zonas del país manifiestan que el abigeato se está saliendo de control y que si bien las autoridades realizan algunas capturas, el proceso de judicialización de los bandidos es demasiado laxo.   Atlántico   Para Ricardo Rosales Zambrano, reconocido ganadero y representante por el Atlántico ante la junta directiva de Fedegán, una de las grandes preocupaciones del departamento es la falta de justicia. (Lea: Abigeato, un problema en aumento en el Atlántico)   Señaló que en muchos casos la Policía y el Ejército actúan. Sin embargo, a la hora de poner a disposición de la justicia a los capturados por robo de ganado, el problema es que a las pocas horas estos quedan en libertad.   La Guajira   José Ramón Molina, presidente de la Cooperativa de Agricultores y Ganaderos de La Guajira, Coojira aseveró que "lamentablemente" el abigeato se ha convertido en un tema reiterativo en la región. En cuanto a los índices de abigeato, comentó que el municipio de Villa Nueva tiene uno de los más altos.     "Las autoridades municipales y policivas no hacen controles en los lugares donde se comercializa la carne y esto facilita que se incremente el abigeato. Si no hay un verdadero control, los casos se van a seguir presentando y mientras haya quien reduzca, habrá quien robe", contó. (Lea: 5 modalidades de abigeato que todo ganadero debe conocer)   Bolívar   Para Sinning Soto, ganadero de Monpox, los productores necesitan la atención urgente del Ejecutivo, sobre todo en lo que tiene que ver con la inseguridad. Según él, el abigeato está desbordado y los asaltos son cada vez más frecuentes.   “Con las leyes actuales, se beneficia más el bandido. Uno agarra a un cuatrero robando y más se demora uno en llevarlo, que las autoridades en soltarlo”, señaló.   Cesar   El presidente del comité de ganaderos de Codazzi, David Adolfo Hernández Gómez, expresó su preocupación por el aumento de este flagelo en el municipio y en todo el departamento. Según él, la modalidad del carneo es la más empleada por los delincuentes.   “En cualquier noche, llegan y sacrifican 2 y 3 vacas en las fincas, se llevan las mejores carnes y lo demás lo dejan botado. (…) Amarran al animal, le disparan con changón en las patas de adelante y lo pelan ahí, se llevan la carne y dejan el cuero y la osamenta”, declaró.   Magdalena   De acuerdo con Carlos Tomás Severini, representante del Magdalena ante la junta directiva de la Federación Colombiana de Ganaderos, Fedegán, el abigeato se está sintiendo con mucha fuerza en todo el departamento. (Lea: Alerta en el Magdalena medio por continuos casos de abigeato)   Indicó que este flagelo es el pan de cada día de los ganaderos del sur del Magdalena, región en la que casi a diarios se reportan casos de pérdida de entre 4 y 45 reses desde Santana, El Banco, Pijiño del Carmen, entre otros.   Boyacá   Javier Guarín Agudelo, presidente de la Asociación de Productores de Leche de la vereda Calderón, Asolecal, en Puerto Boyacá, manifestó que el abigeato continúa afectando de sobremanera a los ganaderos de la región.   “Hace poco tuvimos una reunión con la Fiscalía, el Gaula y el Ejército, donde los gremios Asoregan y Asolecal estuvieron presentes y en la que los ganaderos comentaron sus inquietudes a las autoridades”, indicó.   Antioquia   Para Daniel Cadavid Londoño, representante legal de la Asociación de Ganaderos y Agricultores del Bajo Cauca y Alto San Jorge, Asogauca, y representante de la junta directiva de Fedegán por Antioquia, la problemática que vive el departamento a raíz del abigeato está pasando de castaño a oscuro.   Manifestó que la principal dificultad ha sido la falta de denuncias por parte de las víctimas, que en la mayoría de casos prefieren guardar silencio en aquellos casos que involucran pocos animales.   Huila   En ese sentido se pronunció Luceni Muñoz Bermeo, directora ejecutiva del Comité de Ganaderos del Huila, quien aseveró que el departamento se está viendo seriamente afectado por cuenta del abigeato y el carneo, delitos que generan muchas consecuencias negativas para el sector. (Lea: 5 modalidades de abigeato que todo ganadero debe conocer)   El fenómeno viene tomando fuerza en aquellos municipios cercanos a los centros poblados más grandes Por ejemplo, aquellos que se encuentran cerca de la capital como Palermo, Campo Alegre, Hobo, Aipe, y Rivera.Mientras que en el sur del departamentoTimanáy en el occidenteLa Plata, también padecen a las bandas dedicadas al hurto de animales.   Meta   De acuerdo con Carlos Luque Barriga, presidente de la junta directiva de la Federación Colombiana de Ganaderos, Fedegán,una de la razones por la cuales el abigeato está tomando cada vez más fuerza en el Meta se debe a la falta de presencia tanto militar como policial.   Asimismo comentó que otra de las posibles causales de esta problemática sería el aumento de la delincuencia común en la región.   Casanare   Daniel Salamanca, director ejecutivo del Comité de Ganaderos de Yopal, manifestó que ‘desafortunadamente’ el robo de animales, por partes o en lotes, continúa vigente en el departamento.  (Lea: 5 modalidades de abigeato que todo ganadero debe conoce)   “El abigeato no ha disminuido para nada porque la demanda se mantiene. Por más campañas institucionales que realicemos que invitan a no comprar carne robada, como en barrios de la periferia en donde un kilo legal vale cerca de $14 mil y uno ilegal $8.000, la gente tiende a optar por lo más barato”, sostuvo.   Ante esta situación, los productores del país solicitan un mayor acompañamiento de la Fuerza Pública y de las entidades sanitarias como el Instituto Colombiano Agropecuario, ICA, y el Invima, para combatir este flagelo que cada vez está llegando a los lugares más insospechados.