El delito de abigeato no cesa y cada vez genera más preocupación en las regiones de Bolívar, Magdalena y Atlántico, específicamente en el sur del departamento. Los índices de este flagelo han aumentado considerablemente, afectando a los pequeños ganaderos y generando un clima de inseguridad en las zonas rurales. Ante esta situación, los ganaderos y agricultores demandan un fortalecimiento de las acciones de seguridad para combatir ye prevenir el abigeato.
El testimonio del pequeño ganadero Armando Mosquera, residente en el municipio de Campo de la Cruz, para el portal Coopercom, evidencia la gravedad de la situación. Según Mosquera, se han registrado dos casos consecutivos de abigeato en su zona, y lo más preocupante es que estos robos de ganado ocurren en las propias tierras de los pequeños ganaderos.
La falta de pronunciamiento por parte de las autoridades locales, departamentales y nacionales ha generado descontento y frustración entre los afectados. “Nos tiene preocupados y hasta el momento nadie se pronuncia y no veo de parte del gobierno departamental y nacional de buscar una solución a este problema”, indicó Mosquera
Ante la ausencia de soluciones efectivas, los ganaderos están considerando la posibilidad de llevar a cabo un bloqueo en la vía Oriental, con el propósito de llamar la atención de las autoridades y obtener el apoyo necesario para resolver esta situación alarmante. El paro planeado busca la presencia de un delegado a nivel nacional que pueda brindarles la colaboración requerida.
“Estamos programando un paro en la carretera Oriental, la fecha no la tenemos, estamos esperando el apoyo de otros municipios para tomarnos la oriental y venga un delegado a nivel nacional y nos puedan colaborar”, subrayó el ganadero.
Además, los ganaderos han manifestado su disposición a paralizar sus labores como medida de protesta frente al aumento del abigeato en la región.
Ganaderos claman por seguridad
Los ganaderos han expresado que el abigeato no solo los afecta económicamente a ellos, sino que también tiene un impacto negativo en la seguridad y la estabilidad de las comunidades rurales. Estos delitos están generando un clima de temor e incertidumbre entre los residentes, quienes ven amenazada su tranquilidad y calidad de vida. Además, el abigeato perjudica la economía local, desincentiva la inversión y afecta el desarrollo de la ganadería en la zona.
Exigen que las autoridades competentes tomen medidas contundentes para combatir el abigeato en estas regiones, fortalecer la presencia policial en áreas rurales y mejorar la coordinación entre las instituciones encargadas de la seguridad. Además, se deben implementar estrategias de prevención y concientización dirigidas tanto a los ganaderos como a la comunidad en general.