logoHeader
precio leche en colombia

Foto: CONtexto ganadero.

regiones

6 mitos que la industria le ha hecho creer al productor de leche

por: - 31 de Diciembre 1969

A través de los años, la industria le ha hecho creer al ganadero que debe estar agradecido por el precio al que le paga el litro de leche. CONtexto ganadero revela 6 argumentos que usa la industria para restarle importancia al papel del productor y, de paso, disminuir el valor que le reconoce.

A través de los años, la industria le ha hecho creer al ganadero que debe estar agradecido por el precio al que le paga el litro de leche. CONtexto ganadero revela 6 argumentos que usa la industria para restarle importancia al papel del productor y, de paso, disminuir el valor que le reconoce.   En aras de mejorar sus utilidades y obtenerlas con la menor inversión posible, la industria se ha encargado de hacerle creer a los productores de leche en Colombia una serie de situaciones en las que justifica los bajos precios que paga por el líquido y la manera en la que debe funcionar la cadena.   El tema fue analizado por los miembros de la oficina de Planeación del Fondo Nacional del Ganado, FNG, administrado por Fedegán, el pasado lunes. Durante el espacio se determinaron 6 hechos que calificaron como “mitos” en los cuales la industria viene justificando su proceder y que ellos con argumentos se encargaron de explicarle a CONtexto ganadero no son ciertos. (Lea: Las 10 propuestas de Fedegán sobre la fórmula del precio de la leche)   Mito: El ganadero es el más ineficiente de la cadena   Desde hace mucho tiempo, según el equipo de trabajo, la industria siempre le hace creer al productor que es el eslabón más débil de la cadena, se le pide mejorar su producción, su tema de los costos, entre otros aspectos.   Realidad: En 2 décadas, los ganaderos del país pasaron de producir 5.200 millones de litros de leche a 6.700, es decir hubo un trabajo serio que permitió dicho incremento, y ahora que se consiguió, la industria no tiene como sacarle la leche, es decir es ella la que no ha hecho la tarea.   Igualmente, los ganaderos han revelado sus costos de producción: buenos, malos o regulares; mientras que cuando se le pide a la industria que los dé a conocer para determinar dónde están las ineficiencias optan por cerrarse.   Mito: El tema del enlechamiento en Colombia   Los integrantes de la oficina de Planeación coincidieron en que se le ha hecho creer al ganadero que cuando la industria está 'sobreestockeada' quiere decir que está enlechada y eso no es cierto. (Lea: "Medidas para el sector lácteo sirven, pero son insuficientes": Lafaurie)   Realidad: El hecho de que las empresas se llenen de inventarios no quiere decir eso. Los términos deben saberse diferenciar. Los industriales deben reconocer que muchas veces son ineficientes y se llenan de inventarios de leche importada y no saben qué hacer con ella.   Mito: El consumo   Desde hace un tiempo se asegura que en Colombia todo el mundo consume leche y que si el precio bajara no por ello aumentaría el consumo y que por lo mismo no se justificaría hacerlo.   “Se nos ha hecho creer que se produce mucha leche y que toda es consumida en el mercado. El discurso es que la demanda interna está abastecida y que hay que salir a conquistar el mundo”, señalaron durante la jornada de trabajo. (Lea: Productores de leche irán a paro en julio, si no se resuelve la crisis)   Realidad: En nuestro país hay más de 12 millones de personas pobres que no tienen posibilidad de consumir leche o que ingieren un producto sin condiciones nutritivas o de higiene suficientes.   “La idea sería poder llegar a esos 12 millones de personas, con productos diferenciados, de bajo precio, eso le representaría a la industria un segmento muy importante y que podría explotar constantemente. Actualmente, eso no pasa por la leyenda de que el consumo está saturado”, precisaron los funcionarios.   Mito: El tema del transporte   En la actualidad este rubro es asumido por el ganadero, por cada litro que se le recoge la industria le descuenta un valor y le hace creer que es muy eficiente en su cadena logística, un sistema que paga el productor y un costo que al final le es trasladado al consumidor.   Realidad: Hoy en día se evidencia el incremento del consumo de leche UHT en detrimento de la pasteurizada, no por su calidad nutricional ni nada parecido, es porque la industria favorece su cadena logística. Como la UHT tiene mayor conservación, optan por no enviar bolsas de leche pasteurizada a diario sino que lo hace cada 3 o 4 días y con ello disminuye ese rubro. (Lea: 5 hechos que desmitifican el enlechamiento en Colombia)   Así las cosas, “mientras que en otros países la leche UHT casi ni se ve en los mercados, acá seguimos con el cuentico de que la leche se conserva más en una caja y que eso le evitar ir menos veces a la tienda o evitar que el producto se le dañe, cuando realmente la calidad composicional y nutricional de ambos tipos de leche es exactamente la misma”, explicaron.   Mito: El tema del precio   Se justifica la industria diciendo que acá se paga un precio muy elevado al productor dada su baja productividad.   Realidad: Si uno compara con otros países se da cuenta que el precio está en el promedio de la región. Eso comprueba que siempre se van a este lado de la cadena y no al otro, representado por quienes venden la leche, como las grandes superficies, supermercados, entre otros, que son quienes sin incurrir en esfuerzo alguno le ganan hasta un 30 % al producto   Mito: El pago de bonificaciones   Se le ha hecho creer al ganadero que se le pagan unas bonificaciones voluntarias por hacer bien las cosas y le dicen que hay una fórmula para ajustarles el precio. (Lea: Unaga hace peticiones “urgentes” a propósito del precio de la leche)   Realidad: “Cuando un productor es juicioso y hace toda la tarea y el precio al que le deben pagar cada litro de leche se eleva demasiado, en ese momento interviene la industria y recorta esas bonificaciones para ajustarlas al precio que a ella le conviene. Eso desestimula el productor y rompe el sistema de pago que ellos mismos definieron; es decir las bonificaciones terminan siendo un mito.