La denuncia fue hecha por los ganaderos de Yopal, luego de la Asamblea Municipal que se llevó a cabo el pasado viernes 9 de mayo, en donde se evidenció que uno de los temas que más preocupan es el del abigeato.
Una cifra alarmante fue revelada por los productores pecuarios yopaleños que participaron en la Asamblea Municipal de la capital del Casanare. Según manifestaron los ganaderos de la región, diariamente son hurtadas 30 reses en Yopal, situación que los tiene alarmados, ya que estos animales están siendo sacrificados ilegalmente y su carne se está comercializando en esta zona del país. (Lea Casanare cada vez más azotado por el abigeato)
Según manifestó Margarita Restrepo, dirigente gremial del departamento, la poca falta de control entre la Policía, las entidades de salud de la ciudad y el departamento, y el Instituto Colombiano Agropecuario, ICA, son los responsables de que el abigeato se haya disparado de esta forma en la región.
“Como no hay nadie que haga vigilancia sobre la carne que se vende en los expendios, los delincuentes llegan hasta las fincas, se roban un par de animales, los pelan ahí mismo y se llevan las canales, Es decir, cualquiera puede sacrificar una res en su predio, sin los más mínimos estándares sanitarios”, argumentó Restrepo. (Lea: Ganaderos de Casanare, preocupados por su seguridad)
Por su parte, Néstor Catuna, coordinador de la Unidad Regional de Desarrollo Ganadero de la Federación Colombiana de Ganaderos, Fedegán, para Arauca y Casanare, y quien participó en la Asamblea, aseguró que la Policía viene trabajando en la estructuración de un cuadrante conformado por los productores, quienes estarán en permanente comunicación con las autoridades en caso de que se presente un hurto o alguna situación que ponga en riesgo su seguridad.
“Los empresarios le están pidiendo a la Fiscalía que tipifique el hurto de ganado como un delito de mayor cuantía, porque actualmente cuando los ladrones son atrapados en flagrancia, como el abigeato es una falta de menor valor, no les da cárcel, los sueltan a los 20 minutos y siguen delinquiendo”, expresó el funcionario. (Lea: Ejército y gremio ganadero buscan mitigar la inseguridad en Casanare)
Para Marleny Gutiérrez Oropeza, secretaria de Gobierno departamental, la falta de denuncia por parte de los casanareños y yopaleños, ha generado que el problema se haya salido de control, ya que los reportes sobre abigeato por parte de los afectados son nulos.
“Si la capacidad del alcalde para atender los problemas de seguridad o convivencia es baja, pasan al gobernador, pero si este requiere mayor ayuda, son transmitidos al presidente, además los mandatarios locales son los jefes de Policía en cada población, por lo que estos problemas deben ser atendidos por los uniformados de acuerdo a lo que exige la ley”, sostuvo la secretaria en un diario regional. (Lea: Secuestro exprés, cada vez más frecuente en Casanare)
Este diario quiso hablar con el Teniente Rodríguez, de la Policía de Carabineros, quien está al frente de todos los temas en cuanto a ganadería, pero no respondió las llamadas de CONtexto Ganadero.
En Arauca no para el abigeato
El pasado sábado, 10 de mayo, en cercanías al centro poblado de Arauca capital, fueron hurtadas 1.250 reses de la finca del exgobernador, Julio Acosta Bernal, siendo uno de los robos de ganados más grandes conocidos en esta región de la Orinoquía. (Lea: Abigeato tiene azotado al departamento de Arauca)
Según reveló el administrador a las autoridades, varios sujetos armados llegaron al predio, donde luego de intimidar a los trabajadores y amordazarlos, procedieron a sacar el ganado a pie, usando un tractor para abrir una trocha con el propósito de llevar las reses a suelo venezolano, obligando a varios campesinos de la zona a acompañar el viaje de animales. (Lea: Ganaderos de Arauca, preocupados por la inseguridad)
No obstante, este diario quiso comunicarse con fuentes policiales del departamento, con el propósito de conocer qué acciones van adelantar en favor del sector ganadero, a fin de evitar que casos como estos se vuelvan a presentar, pero no respondieron nuestros llamados.