Los productores del departamento se quejan por la baja rentabilidad del negocio y exigen soluciones como aportes de concentrados e insumos, el arreglo de las vías terciarias dañadas por el invierno y mayor control en la movilización de bovinos.   Luego de un atípico invierno durante los meses de diciembre y enero que afectó gran parte del departamento. Además de la proliferación de plagas y la aparición de enfermedades podales, se registró una disminución del alimento bovino y daños en vías terciarias.     En aquel entonces, Hernando Valderrama Carvajal, representante por el Huila ante la junta directiva de la Federación Colombiana de Ganaderos, Fedegán, se mostró preocupado por el estado de los corredores veredales en municipios como Elías, Gigante, Hobo y Timaná.   A pesar de que el invierno ya se terminó, aseguró que las vías siguen en mal estado y todavía no se han reparado. (Lea: Fuerte y atípico invierno perjudica a los ganaderos de Huila)   “Si en tiempo normal las carreteras permanecen malas, imagínese lo que ocurre en invierno. Las vías todavía siguen muy afectadas, porque frena el transporte de ganado, de leche y demás productos agrícolas, todo lo que tenga que ver con el campo”, indicó.   Sin embargo, la mayor preocupación tiene que ver con el pago de la leche, que no supera los $1.000 y que en otros municipios llega a los $800. Así lo afirmó Miguel Polanía, ganadero y miembro de la Asociación de Ganaderos de Algerciras, Asoganal.   “El negocio está difícil porque la leche nos la pagan baratísima. (…) Además, los insumos están muy costosos: los concentrados, las sales, los costos veterinarios”, reseñó. (Lea: Ganaderos del Huila están preocupados por división del gremio)   Debido al bajo precio de la leche y el alto valor de los insumos, Polanía manifestó que los productores están recibiendo unas utilidades muy bajas, por lo cual el negocio no está siendo rentable.   “Se puede decir que estamos trabajando a pérdida, porque nos tocó la subida de los precios mientras que la leche sigue igual. Por ese lado no hemos tenido recompensa”, lamentó.   Las pocas utilidades también se observan en la venta de ganado, pues el kilo de novillo gordo está a $4.000, por debajo del promedio nacional. (Lea: 5 zonas del país con vías terciarias afectadas por las recientes lluvias)   Así las cosas, Polanía solicitó la ayuda del Gobierno para que entregue alimentos bovinos subsidiados, que no solo se limitan a los suplementos como silos y henos sino también concentrados y otros insumos como fertilizantes.   Por su parte, Valderrama Carvajal solicitó el cumplimiento de la norma que regula el pago de la leche y ayudas del Gobierno frente a la crisis.   “Así como incrementan los costos todos los días, el Gobierno debería subir el precio de la leche. También tendría ponerle cuidado a las vías y a la seguridad, porque hay mucho abigeato”, declaró. (Lea: Ganaderos en Huila buscan apoyo para hacer mejoramiento genético)   El miembro de la junta directiva de Fedegán exigió mayores controles en el transporte de ganado, pues debido al cierre de las plantas de sacrificio municipales, se dispararon los índices de abigeato y sacrificio clandestino en el departamento.   “Aquí cerraron los mataderos por lo que la gente está sacrificando en las fincas. De lo que tengo conocimiento, solo funcionan los de Pitalito, Neiva y La Plata”, remató.