En Nariño, los bloqueos recurrentes en la vía Panamericana representan una amenaza significativa para el sector ganadero, especialmente para la producción lechera, como lo señala José Luis Bernal Romero, Director Ejecutivo de Sagan, en una entrevista con CONtexto Ganadero. Destaca que "En Nariño se producen 1 millón noventa mil litros según la encuesta a productores". De este volumen, "de 350 a 400 mil litros son transformados por la industria formal, de esos 250 mil se transportan a diario por empresas como Alpina para procesarla, y cuando la vía se cierra, esos 250 mil litros quedan sin poderse procesar".

Las consecuencias de los bloqueos se intensifican cuando los transportadores no pueden avanzar en la vía, lo que lleva a que las empresas en Nariño suspendan el acopio de leche local. Según Bernal Romero, "Si los paros se extienden más de dos días, no les reciben la leche hasta que frene el paro". Esta interrupción tiene un impacto directo en la distribución de productos lácteos hacia el interior del país, generando pérdidas significativas para el sector lechero.

El problema se agrava aún más debido a la geografía desafiante de la región. Cuando hay bloqueos en la Vía Panamericana, los productos no pueden llegar al departamento de Cauca desde Nariño, afectando tanto a grandes como a pequeñas empresas procesadoras. Se estima que cerca de 400 mil litros diarios ya procesados no pueden alcanzar su destino final debido a estos bloqueos.

La falta de vías alternativas efectivas se suma a la crisis. Durante las fuertes lluvias, los deslizamientos frecuentes en la única ruta comercial disponible muestran la vulnerabilidad del sistema de transporte en la región. La propuesta de abrir una nueva ruta, como la vía por Mocoa en Putumayo, ha surgido como una solución potencial, pero se enfrenta a desafíos significativos debido a su peligrosidad y altos costos logísticos, que se trasladarían al consumidor final.

A nivel social, las comunidades locales se ven obligadas a recurrir a los bloqueos como una forma de protesta cuando sienten que el gobierno no cumple con sus compromisos. Sin embargo, estas acciones tienen consecuencias devastadoras para toda la economía regional. Bernal Romero resalta la necesidad de que el gobierno tome medidas concretas para garantizar el flujo comercial y respetar los derechos de los ciudadanos.

En el contexto más amplio, los bloqueos afectan no solo al sector lechero, sino también al agro y a otras industrias del departamento. La importación de productos esenciales como arroz y frutas se ve comprometida, junto con la llegada de insumos clave para la producción. Desde el inicio del año, el departamento de Nariño ha enfrentado más de 34 bloqueos en la Vía Panamericana entre Pasto y Cali, generando pérdidas económicas que superan los 600 mil millones de pesos.