banner

Cargando...

¿Sus cerdas pierden lechones? Descubra cómo alimentarlas mejor durante el parto

Angie Barbosa 17 de Abril 2025
¿Tiene producción de cerdas?Foto: actualidadporcina.comUna vez la cerda ha parido, la demanda nutricional se dispara.

Una dieta mal balanceada durante el parto puede comprometer la salud de la cerda y la supervivencia de los lechones. Conozca las claves nutricionales que garantizan buenos resultados reproductivos y productivos.


La alimentación de las cerdas a lo largo de su preñez no es un tema menor. Un manejo nutricional acertado puede marcar la diferencia entre una camada saludable o un grupo de lechones con bajo peso y altas tasas de mortalidad.

Chayanne Granja Ortiz, tecnólogo en producción agropecuaria y administrador de Agropecuaria Chayanne, explicó que la alimentación debe estar acorde con la etapa gestacional que atraviesa la hembra.

Cada fase de la preñez tiene un requerimiento nutricional diferente, ya sea en la gestación temprana, media o tardía”, afirmó. (Lea en CONtexto ganadero: Récord en la industria porcina con 45 lechones de una camada)


Del embarazo al parto


De acuerdo con Granja, durante la gestación temprana, lo primordial es asegurar la implantación embrionaria. En esta etapa no se requieren grandes cantidades de energía, pero sí un suministro constante y balanceado.

Más adelante, en la gestación media, se busca mantener la condición corporal, evitando que la gane demasiado peso, lo que puede generar complicaciones al momento del parto.

En la última fase de la gestación, cuando los lechones atraviesan su mayor fase de crecimiento, la alimentación debe ajustarse. “Se debe elevar un poco el requerimiento energético”, explicó Granja Ortiz.

Aunque existen alimentos diseñados para cubrir las tres etapas, al llegar el parto, el plan alimenticio debe ajustarse significativamente.


Lactancia, momento crítico


Una vez la lechona ha parido, la demanda nutricional se dispara. La producción de leche y el desgaste corporal exigen una dieta con mayor contenido energético y proteico.

“En lactancia, la demanda energética se duplica o se triplica”, dijo Granja Ortiz y señaló que no hacerlo pone en riesgo tanto a la madre como a las crías, ya que una baja producción de leche puede llevar a la inanición, bajo peso al destete y pérdida de la condición corporal de la cerda.

Si no se cubren correctamente estos requerimientos, los efectos se hacen visibles rápidamente. En gestación, las consecuencias incluyen bajo peso al nacer, menor número de nacidos vivos, reabsorción embrionaria y problemas en el desarrollo del tejido mamario.

En lactancia, puede haber una pérdida de condición corporal excesiva, baja producción de leche y alta mortalidad en lechones”, aseguró el experto. (Lea en CONtexto ganadero: Aprenda otras alternativas de alimentación para porcinos)


Problemas posteriores al destete


Uno de los problemas más comunes en sistemas mal manejados es el retraso en el retorno al celo después del destete.

“Se presentan intervalos muy amplios, con hembras que llegan al día 6, 7, 8 o 9 sin mostrar celo ni responder al recelo dos veces al día”, explicó Granja Ortiz.

Para evitar estos escenarios, el plan de alimentación debe estar cuidadosamente formulado. Proteína de alta calidad, energía digestible, lisina y aminoácidos esenciales son clave durante la lactancia.

“Las vitaminas A, D y del complejo B son fundamentales tanto para gestación como para lactancia”, señaló el especialista.

También se debe prestar atención al suministro de minerales como calcio, fósforo, zinc y selenio. Estos contribuyen a la salud ósea, el sistema inmune y la reproducción.

La fibra moderada es otro elemento clave para mantener la saciedad de la hembra gestante y evitar el estrés alimenticio, que puede provocar reabsorciones embrionarias o partos prematuros.

Un aspecto frecuentemente subestimado es la hidratación. Siempre hay que suministrar agua fresca y abundante, pues la falta del líquido puede afectar gravemente la producción de leche y el bienestar general del animal.

En palabras de Granja Ortiz: “Una cerda bien alimentada es una cerda que responde bien”.


banner