Aunque el presidente de Colombia aún no ha precisado el alcance de su iniciativa, importantes voces del país la rechazan y aseguran que sería “inaceptable” la participación de las Farc en este nuevo modelo de seguridad.
Tras una reunión de casi una hora realizada el pasado lunes en el Palacio del Eliseo, en París, los presidentes de Colombia y Francia lograron diferentes acuerdos que se podrán ver reflejados en el país en corto plazo, especialmente, cuando inicie la etapa de posconflicto si se firma la paz con el grupo insurgente de las Farc.
Juan Manuel Santos y François Hollande acordaron un trabajo conjunto en distintas áreas, principalmente en lo relacionado con el campo. Frente a esto, el Gobierno de París comenzará a darle capacitaciones a las Fuerzas Públicas colombianas para la conformación de una policía rural que blinde el desarrollo agrario, en la cual no se descarta que puedan participar miembros de las Farc. (Lea: Cese al fuego: Un resultado)
"No se me ha ocurrido, pero no lo descarto. Bien puede negociarse con la contraparte algo en ese sentido", enfatizó el mandatario colombiano en una rueda de prensa que se realizó al término del encuentro bilateral.
Frente a esto, Alfredo Rangel, senador de la República por el Centro Democrático, aseguró en diálogo con CONtexto ganadero que la medida de Juan Manuel Santos “es inaceptable” en el camino que se está llevando para conseguir la paz. (Lea: “El Gobierno ha bailado al son que Farc le ha venido tocando”: Lafaurie)
“Es inaceptable que las Farc permanezcan en armas con el pretexto de que serán parte de la tal entidad de la ‘gendarmería en Colombia’”, aseveró el congresista, quien también aseguró que “esta medida es una propuesta improvisada del presidente, pues no ha sido analizada en sus implicaciones y desinstitucionalizaría a la Fuerza Pública”.
Por su parte, el expresidente Álvaro Uribe Vélez aseguró a través de su cuenta de Twitter que ningún colombiano aceptaría que quienes cuiden los campos sean los “eventuales guerrilleros” que se desmovilicen tras el proceso de paz de La Habana. (Lea: Muchos ganaderos prefieren pagar vacuna que denunciar)
“Si la Policía rural va a estar integrada por desmovilizados de las Farc, los colombianos debemos decir: No. Para el país es funesto que personas que han sido terroristas cumplan funciones de Policía en Colombia”, insistió Uribe Vélez.
¿Funcionaría una Policía rural con el modelo del país europeo?
La intención de Juan Manuel Santos es que la gendarmería francesa ayude a crear un cuerpo especial de seguridad para el campo colombiano, dirigido por la Fuerza Pública, que se encargaría de garantizar la seguridad de la población que vive las regiones rurales. (Lea: Cuando una sim card es más peligrosa que una pistola)
De acuerdo con Carlos Alfonso Velásquez, coronel retirado del Ejército Nacional y jefe del área socio-humanística de la Facultad de Comunicación en Universidad de La Sabana, el error está en que la presencia de seguridad en Colombia se ha aislado un poco de las áreas rurales por la presión pública.
“Por ejemplo los carabineros: ellos siempre están actuando más en las áreas urbanas, donde hay más presión de opinión pública. En Bogotá hay miles de carabineros trabajando en tránsito. Lo ideal sería una nueva fuerza pero sin más personas. Es decir, las fuerzas armadas actuales con Ejército, Policía, Infantería de Marina, etc., desdoblarlas y crear una guardia rural con dedicación al campo”, ultimó Velásquez.
En este punto, el senador Rangel explicó que la Policía Nacional en Colombia es lo más parecido a la infantería francesa, por lo que no requeriría un cambio en el cuerpo que blinda el sector rural del país. (Lea: Cese al fuego bilateral: ¿primer paso en la disminución de nuestra Fuerza Pública?)
“La Policía colombiana tiene muy buen conocimiento de las zonas rurales y ha actuado permanentemente allí para brindarle seguridad a la población. Por tanto, no se requeriría una nueva entidad como la que propone el presidente Santos”, señaló el congresista del Centro Democrático.