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A través de sus redes sociales, el Ministerio de Agricultura viene adelantando una campaña para que los colombianos se concienticen del trabajo de los ganaderos y consuman más leche y productos lácteos colombianos.
Esto lo hace a través de una serie que se llama “El sabor de nuestra tierra” y donde dedica capítulos a una región, que en el caso de la leche fue Antioquia, en donde muestran el trabajo de pequeños ganaderos, quienes van narrando cómo es su trabajo diario para que el público lo entienda y prefiera lo que se produce en nuestras tierras.
En esta oportunidad, por ejemplo, intervienen hombres y mujeres de San Pedro de los Milagros, Donmatías y Bello e incluso una empresaria de Donmatías, quien compra a los ganaderos de la región.
Todos ellos van contando cómo se deben levantar desde las 3 de la mañana para iniciar su jornada y que es un trabajo que no tiene días de descanso porque tal como lo señalan allí las vacas no saben cuándo es 31 de diciembre, o el Día de la Madre o la Semana Santa y por eso hay que ordeñarlas a diario, sin importar si la persona encargada de dicha labor se encuentra enferma. (Lea en CONtexto ganadero: 3 campañas ejemplares para fomentar el consumo de leche)
Algo en lo que todos coinciden es en la importancia de consentir a los animales, hablarles y, en algunos casos, hasta le ponen música para que las vacas estén felices y produzcan más leche.
Los testimonios
María Adelaida Arboleda, es una productora de San Pedro de los Milagros, quien comienza desde las 3:30 de la mañana cuando se levanta y recoge las vacas para llevarlas al ordeño, ellas van entrando, les gusta ser ordeñada porque allí comen su concentrado, explica en el video.
Luego pasan a un potrero nuevo donde comen pasto de la mejor calidad para que puedan dar más leche y mientras tanto se lava la sala de ordeño porque se está produciendo un alimento y hay que buscar la inocuidad.
Sostiene que la lechería es una rutina, es una disciplina y no hay otra forma de describirlo. “El que no es constante y no es disciplinado no tiene como producir leche”, asegura.
Por su parte, Luz Mary Tamayo, de la finca Las Tamayo, en el municipio de Bello indica que “lo más bonito que yo veo de la lechería es poder crecer con ella y no solo nosotros sino nuestras familias y las familias del país”. (Lea en CONtexto ganadero: Se activa nuevo programa del Fondo de Estabilización en procura del sector lácteo)
Explica que a las vacas se le revisa mucho la ubre, que sea bonita, pareja, que no tenga ningún problema de mastitis y no tengan cuartos disparejos, se mira si hay alguna en calor. Igualmente se revisan los apuntes para ver si está enferma, o existe alguna que haya que secar. Selladas todas las vacas, les pone el alimento y las consiente.
Entre tanto, Julio Pérez, de la Vereda de Donmatías, explica que el concentrado se le da diario a mañana y tarde para que coman mientras se les ordeña. Acaban de ordeñar, se lavan todos los ordeños, organizan las máquinas y se va a desayunar, luego hay que ir a fumigar, a regar estiércol de las marraneras, y a las 12 regresa a la casa hasta que vuelva a ser hora del ordeño.
A su vez, Sebastián Querubín, productor lácteo de Donmatías, destaca que “tenemos una leche producida con excelentes condiciones, producida a pastoreo que tiene un perfil de ácidos grasos que mejora la salud”
Añade que “todos nos llenamos la boca diciendo que qué bueno es ver crecer el país, pero ver crecer el país es apoyar también la economía campesina. Es gente que vive de la leche, de una o dos canecas de leche, que hacen todo el esfuerzo y que han crecido en su medida tecnológica también para generar productos de mayor valor a la industria y al consumidor final entonces a tomar leche colombiana”. (Lea en CONtexto ganadero: ‘Toma leche 100% colombiana’)
Por su parte, Lina Torres, de Lácteos La Fontana, en Donmatías, indica que “nosotros le compramos la leche a los productores de veredas aledañas que tenemos en el municipio, tenemos incluso productores que estuvieron en la época de mi papá y ya sus hijos van como por ese mismo legado y nosotros también tenemos como esa relación muy afín y muy estrecha con cada uno de ellos”.
Los productores le han apostado mucho a la buena calidad de la leche, entonces ponen en práctica todo el tiempo las buenas prácticas de ordeño, también hacen un tema de refrigeración a la leche para que se conserve en los términos que debe conservarse y no se altere la calidad ni la inocuidad de la leche.
Con todo esto se busca que los colombianos conozcan el trabajo de los ganaderos para producir la leche y los productos lácteos que llegan a su mesa y de esta manera prefieran lo colombiano.