Dos de los principales ejes de la campaña del candidato-presidente Juan Manuel Santos se mueven alrededor de mentiras: una reparación de víctimas sin víctimas y una mejora al campo sin campesinos.
Ya son dos escenarios en los que se ha cuestionado al actual presidente de la República Juan Manuel Santos Calderón por proponer políticas y soluciones para falsos beneficiarios. El primero de ellos se presentó en la reunión del pasado 12 de marzo, en donde al máximo dirigente de los colombianos se reunió, de acuerdo con varios líderes campesinos, con falsos voceros de la ruralidad en el país.
En ese entonces, Cesar Pachón Achury, vocero de Dignidad Agropecuaria Colombiana, aseguró que la reunión llevada a cabo en el Palacio de Nariño se efectuó con “falsos campesinos”, por lo que los resultados no tendrían ninguna relevancia para los labriegos de Colombia. (Lea: ¿Con qué 'campesinos' se reunió el presidente Santos?)
“Como no aceptamos su mermelada, (el ministro) Aurelio Iragorri eligió a dedo a falsos campesinos para el Pacto Agrario. Es un montaje. No se dejen engañar”, expresó el líder del paro agropecuario que por estos días se vive en las regiones del país.
Un debate para víctimas, sin víctimas
El segundo espacio en donde el actual mandatario de los colombianos enfocó sus políticas en falsos beneficiarios, fue durante el desarrollo del foro de víctimas que se llevó a cabo en el marco de ‘Debates de Paz’, una serie de eventos en donde se explicará, a groso modo, qué se está haciendo en La Habana y cómo repercutirá eso en el país.
Este evento, organizado por la Unidad para la Atención y Reparación Integral a las Víctimas y el diario El Tiempo, se anunció como el espacio idóneo para que las víctimas de las Farc tuvieran conocimiento a fondo de las conversaciones en Cuba y pudieran opinar al respecto. (Lea: Aprobada la reforma al fuero militar en Colombia)
La sorpresa de los asistentes fue mayor, al ver que las víctimas que participaron en calidad de expositores, no eran precisamente víctimas de las Farc, no obstante que el foro estaba referido al proceso de paz que se lleva en La Habana con esa organización terrorista.
Guilermo Naar Pardo, presidente de la junta directiva de la Fundación Colombia Ganadera, Fundagán, explicó en una carta enviada a los organizadores del foro que, debido a esa ausencia de víctimas de las Farc, se presenció un debate incompleto y hasta cierto punto incoherente.
“Mientras que el fiscal general, Eduardo Montealegre, y el jurista Gustavo Gallón planteaban escenarios de justicia transicional para los miembros de las Farc, las víctimas sentadas con ellos exigían cárcel y condenas ejemplares para los agentes del Estado y paramilitares”, aseveró Naar Pardo.
Jaime Restrepo, presidente de la Asociación de Víctimas de la Guerrilla Terrorista, aseguró en diálogo con CONtexto Ganadero que la reparación que el Estado les está dando a los colombianos amedrentados por las Farc es precaria. (Galería: El drama de ser una víctima en Colombia)
“Ni el Gobierno Nacional ni las mismas Farc han podido contar con las organizaciones de víctimas de las Farc en el proceso que se está llevando en La Habana. Entonces ellos, para legitimar ese punto del diálogo en Cuba y el proceso con impunidad, lo que han hecho es llevar víctimas del conflicto, pero ninguna persona amedrentada directamente por el grupo armado”, añadió Restrepo.
Por su parte, Fernando Vargas Quemba, presidente del Comité Victimas de la Guerrilla, VIDA, enfatizó en que el Gobierno Nacional está realizando diferentes actos públicos, como este foro, para montar una parafernalia con víctimas del paramilitarismo y de la Unión Patriótica para que se hagan pasar como víctimas de las Farc. (Lea: La verdad: primera víctima)
“Las víctimas se están usado como trampolín para la campaña política de Santos. Lo que estamos viendo es que hay unas falsas víctimas metidas en el aparato de la Unidad de Víctimas del Estado. De las 6 millones de personas que dice tener el Gobierno, 5,5 millones son del desplazamiento, y las verdaderas víctimas de la guerrilla están totalmente olvidadas por el Estado, porque ellos saben que nosotros no pedimos un puñado de monedas cual Judas, sino justicia, que paguen con la cárcel”, culminó Vargas Quemba.
De esta forma, queda entrevisto que dos ejes de trabajo del actual presidente de la República, como lo son el proceso de paz y la crisis agraria, están siendo tratados con falsos representantes, lo que pone en tela de juicio la seriedad del trabajo que se adelanta y la veracidad de las políticas que presenta el Estado.