Si algo ha caracterizado a la Federación Colombiana de Ganaderos, Fedegán, en los últimos tiempos, ha sido su constancia en desarrollar la ganadería colombiana basada en planes estratégicos. En 2006, concibió el Plan Estratégico de la Ganadería Colombiana – PEGA 2019, que luego sería revisado en 2014, en el Plan de Desarrollo Ganadero 2014 – 2019. El primero le imprimió a la ganadería un giro sustancial hacia un esquema técnico, planteándose como objetivo la modernización. Objetivo que hoy luce obvio, pero en aquel entonces era necesario para renovar el destruido espíritu empresarial por la actividad ganadera como consecuencia de largos años de acecho de la violencia guerrillera, de la administración a control remoto de las empresas ganaderas y de entregar el oscuro impuesto de la extorsión, que hacía imposible tener utilidades y hacía impensable la modernización tecnológica. Allí se hablaba de la productividad, de la rentabilidad y la competitividad…, del futuro. De ahí que en el centro de las estrategias la ocupara la Ciencia, la Tecnología y la Innovación. La principal meta cumplida de este Plan fue la certificación del país como libre de fiebre aftosa con vacunación en 2009 –condición infortunadamente perdida en 2017–. Otras no se cumplieron porque no se dieron los supuestos sobre los que estaban construidas, en la mayoría de los casos por la inexistencia de políticas públicas o por su incumplimiento por parte del Estado mismo. En este campo se dejaron sembrados muchos y muy valiosos instrumentos –hoy también abandonados–, como los Centros de Servicios Tecnológicos, las Brigadas Técnicas, los Círculos de Excelencia Ganadera, las Escuelas de Mayordomía, los Núcleos de Asistencia Técnica a pequeños ganaderos, Asistegán, y muy importante, el prestigio técnico que permitió la confluencia de recursos externos de entidades públicas y privadas, nacionales e internacionales, por más de $150 mil millones. Luego vino el Plan de Desarrollo 2014 – 2019, que puso énfasis en la sostenibilidad ambiental, a partir, principalmente, del exitoso proyecto “Ganadería Colombiana Sostenible” aún administrado por FEDEGÁN, con recursos de cooperación internacional provenientes del Global Environmental Facility (GEF) y el Departamento para Negocios, Energía y Estrategia Industrial (BEIS) del Gobierno Británico. Sus resultados le marcan, definitivamente, una nueva senda a la ganadería colombiana. Ese programa nace y busca crecer en medio de una persecución oficial sin antecedentes a FEDEGÁN, que ocasionó la liquidación del Fondo Nacional del Ganado y la interrupción abrupta e irresponsable de todos sus programas, proyectos y servicios, con la única excepción del Programa de Nacional de Erradicación de la Fiebre Aftosa, cuyos funestos resultados dieron al traste con la suspensión del estatus de país libre con vacunación, y ocasionó la pérdida de más de 15 años de esfuerzos y de recursos ganaderos del orden del $1,2 billones, por concepto del costo del biológico y los costos operativos de una vacunación rigurosa y sostenida desde 1997. Plan Ganadería Colombiana – Hoja de Ruta 2018 – 2022 En el marco del 36º Congreso Nacional de Ganaderos, realizado en noviembre 23 y 24 de 2018, y de la celebración de 55 años de vida institucional de FEDEGÁN, se le entregó al gobierno y la comunidad ganadera, una nueva actualización, con un derrotero más cercano, más inmediato y más concreto, de lo que se puede y se debería hacer en el periodo 2018 – 2022. La prioridad de este Plan –compartida con el Ministerio de Agricultura y el ICA–, ha sido impuesta por la coyuntura: la recuperación del estatus sanitario de país libre de fiebre aftosa con vacunación, bajo el considerando que solo a partir de ella se podrán retomar los objetivos de admisibilidad sanitaria a los principales mercados internacionales. La Ciencia, la Tecnología y la Innovación, seguirá siendo eje central a partir de una propuesta que busca superar el rezago tecnológico, con énfasis en pequeños y medianos ganaderos, a través del programa municipios ganaderos sostenibles. Su aplicación programada en 280 municipios con vocación ganadera –que representan el 22 % del total de municipios del país, incluidas capitales, grandes ciudades y distritos–, se hará a través de diferentes esquemas de Innovación. Es un esquema que no sólo tendrá una cobertura muy importante sobre el mapa ganadero del país, sino que generará un efecto multiplicador muy importante. La consigna aquí es no detenernos, señala el documento. El reto es avanzar y superar las adversidades, para darle a la ganadería colombiana el lugar que le corresponde. Vamos hacia una ganadería sostenible económicamente, ambientalmente y socialmente. La meta es la conquista de mercados internacionales de la carne y la leche. Descargue aquí el Plan Ganadería Colombiana – Hoja de Ruta 2018 – 2022.