Ante la falta de garantías ofrecidas por el Gobierno Nacional, los labriegos colombianos preparan desde ya el próximo paro agropecuario que buscará ponerle fin a la crisis rural.

Aunque los garantes de los acuerdos con los labriegos el país: el arzobispo de Tunja, monseñor Luis Augusto Castro, y el defensor del Pueblo, Jorge Armando Otálora, reconocieron el jueves 20 de marzo los avances en el cumplimiento de los compromisos adquiridos por el Gobierno Nacional con los productores del sector agropecuario, los líderes campesinos aseguran que de nuevo les incumplieron con las promesas.

Cesar Pachón Achury, vocero del movimiento Dignidad Agropecuaria, le explicó a CONtexto Ganadero que durante la reunión que se llevó a cabo en la Casa de Nariño en las horas de la tarde, no se contó con las garantías que esperaban los campesinos y el diálogo se frustró “por complot orquestado por los ministros”. (Lea: Presidente Santos, ¿hoy sí tiene tiempo para los campesinos?)

“A la reunión no invitaron a todos los garantes: hizo falta la Procuraduría y la Contraloría. Por otro lado, nosotros habíamos coordinado que la reunión se llevaría a cabo con los grupos campesinos con los que hemos venido trabajando y que no estarían presentes los grupos de disidencia. Pero después de que todos estuvimos sentados en la mesa, lo que hicieron fue ingresar al grupo de disidentes”, aseveró Pachón Achury.

Asimismo, el líder campesino informó que en los próximos días se citará a una nueva reunión con los diferentes movimientos en las regiones del país, con el objetivo claro de definir la próxima fecha del paro agropecuario.

“Vamos a realizar una asamblea para organizar la fecha del paro agropecuario. Hasta el momento el 28 de abril es la fecha establecida, pero miraremos si se realiza durante la primera semana del mes de mayo”, culminó el vocero de Dignidad Agropecuaria.

Senado buscará mejores garantías para el campo

El senador del partido Conservador Arturo Yepes les pidió a los campesinos del país “un poco de paciencia” y dijo que estará atento a que se realice el desembolso de los recursos que exige la ruralidad colombiana una vez concluya la Ley de Garantías. (Lea: Gobierno deja plantado al campesinado colombiano)

“Hay $5.1 billones que fueron aprobados el año anterior para el campo en el país. Por eso, el Senado de la República estará vigilante de la ejecución de esos recursos”, sostuvo el parlamentario.

Entre tanto, el senador Camilo Sánchez, también del partido Conservador, indicó que el trabajo que realizan los labriegos colombianos debe ser fortalecido con políticas que vayan más allá de las subvenciones al campo.

“Se están dando unos recursos para el campo, pero año tras año tendremos que repetir lo mismo y eso es imposible en el tiempo, más en un país como el nuestro. Por eso tenemos que crear una política de subsidios de verdad”, acotó Sánchez.

Ahora el país tendrá que preparase para un nuevo cese de actividades por parte del sector productivo, pues el Estado no brindó las soluciones que los campesinos buscaban para aliviar la crisis que vive la ruralidad colombiana hoy en día.