El presidente ejecutivo de la Federación Colombiana de Ganaderos, Fedegán, José Félix Lafaurie Rivera, advirtió que la inseguridad sigue en franco ascenso en diferentes puntos de la geografía nacional. La proliferación de la coca, una de las razones.   El dirigente, que ha estado visitando diversas regiones de Colombia, se mostró preocupado por la inseguridad rural, pues no hay un solo lugar en el que no le hayan manifestado el delicado panorama que se vive.   Actos delincuenciales de todo tipo, pero principalmente de abigeato, tienen azotados a los productores rurales, que ya no saben ni qué hacer ni mucho menos a quien acudir, pues el tiempo pasa y las respuestas a los casos ya denunciados parecen no llegar nunca. (Lea: “El camino a la paz nos lleva de regreso a épocas ya superadas”: Lafaurie)   En su criterio, una de las principales razones para tratar de explicar el panorama actual es la proliferación de los cultivos de cocaína, situación que se ha venido incrementando por cuenta de las negociaciones que se adelantaron en La Habana y que mermaron el accionar de la Fuerza Pública.   “El país está preocupado por el incremento sensible de la inseguridad, pero esto no es casual ni mucho menos algo aislado; por el contrario, obedece a la expansión de los cultivos ilícitos, a que quienes se dedican al narcotráfico encontraron el momento idóneo para crecer exponencialmente”, describió.   El tema, según Lafaurie Rivera, no debería sorprender a nadie, pues la actual situación responde a lo que suele suceder en este tipo de escenarios. Entre más coca haya en las diferentes regiones, más armas y violencia seguirán siendo protagonistas de primer orden.   Se cuestionó si “¿acaso no negociaron con las Farc la política antidrogas? Con el principal cartel? ¿Cuál paz?”. De paso, reiteró que en el país ya son más de 170 mil las hectáreas dedicadas a su siembra. (Lea: La ganadería ha sido desplazada por la mata de coca)   El presidente del gremio cúpula de la ganadería lamentó el retroceso del que ha sido testigo el país y aseguró que se precisarán muchos años para recuperar la tierra y poder volverla productiva.   “Regresamos a épocas que creíamos ya superadas y volvemos a experimentar sensaciones de las que nos sentíamos libres hace muchos años, como el miedo y la zozobra”, sostuvo.   De igual manera, pidió que se tomen medidas para evitar el transfuguismo de  guerrilleros, algo que ya se viene presentando y que ha hecho que recientemente el ELN venga cobrando tanta fuerza y cometiendo actos delictivos con mayor frecuencia. (Columna: Las hectáreas del delito)   “El Gobierno no puede ser indiferente a esa situación. En su afán por firmar a cualquier precio la paz, ha restado margen de maniobra a nuestras Fuerzas Militares y esa laxitud ha servido para que los disidentes de las Farc migren al ELN, sigan cobrando extorsiones y atenten contra la infraestructura del país.”, concluyó.