Luego del anuncio que hicieron las delegaciones de negociadores desde La Habana sobre las garantías para la participación en política del grupo guerrillero, los colombianos hicieron evidente su descontento a través de las redes sociales.   Los puntos acordados incluyen la creación de un nuevo y autónomo Consejo Electoral, un estatuto para la oposición y la conformación de una comisión para hacer recomendaciones sobre temas de carácter electoral.   Otra de las líneas rojas trazadas por el Gobierno Santos en el proceso de paz que se adelanta en La Habana con la guerrilla de las Farc se cruzó el pasado martes. Ese al menos es el sentir de los colombianos tras el anuncio hecho sobre la participación en política de los miembros del grupo insurgente.    De acuerdo a un comunicado que se dio a conocer a la opinión pública “se eliminaron la mayoría de los pendientes” luego de una revisión entre las partes. De igual manera, se acordó la redacción de un “estatuto de garantías para el ejercicio de la oposición política”. (Lea: El Estado sí derrotó a la guerrilla)   Aunque desde un principio el presidente Juan Manuel Santos había sido enfático en afirmar que no permitiría modificar las instituciones, lo anunciado parece ir en el sentido contrario.   “El Consejo Nacional Electoral será modificado para modernizar y hacer más transparente el sistema electoral, para de esa manera dar mayores garantías para la participación política en igualdad de condiciones y mejorar la calidad de la democracia”, reseña el texto.   Las reacciones no se hicieron esperar, especialmente de los sectores políticos que han mantenido siempre sus reservas sobre la manera en la que se adelantan las actuales conversaciones y en las que un amplio sector de la opinión pública considera que se está cediendo mucho terreno frente a lo que solicitan las Farc.   “Como iguales , Gobierno y Farc integran comisiones para elaborar reformas políticas; también acordarán proyectos de ley respectivos: cogbierno”, señaló en su cuenta de Twitter el senador del Centro Democrático, Alfredo Rangel. (Lea: Santos exige a guerrilla Farc "fecha fija" de desarme para firmar paz)   En la misma red social, el exsenador Luis Carlos Vélez expresó su preocupación sobre una eventual reforma constitucional al sistema electoral y que ella se defina entre quienes conforman las mesas de diálogos entre las Farc y el Gobierno.   En el mismo sentido, el también senador Honorio Henríquez afirmó que lo que se dio a conocer desde Cuba en una reforma al sistema electoral del país. “Continúa la entrega de Colombia a los terroristas”, sostuvo.   Por su parte, Nohora Tovar Rojas, senadora de la colectividad liderada por el expresidente Álvaro Uribe, afirmó que Santos decía que no negociaría la estructura del Estado y que tras el anuncio se ve como entre el mandatario y el grupo guerrillero refundan a Colombia a  su antojo.   Edward Rodríguez, representante a la Cámara, manifestó que causa risa que ahora las Farc “sean las que supuestamente van a hacer más transparente el sistema electoral. Será a punta de fusil y pistola”.   Y según Juan Carlos Pastrana, si el ELN usa la misma fórmula de las Farc, lo que viene en Quito no es diálogo sino otra Asamblea Constituyente. (Lea: "La paz no se alcanzará firmando el fin del conflicto": Lafaurie)   Dentro de las reformas también se incluye la creación de una comisión de 7 expertos para asesoras en temas políticos, especialmente electorales. Todos estos aspectos corresponden al segundo punto de las negociaciones, del que había varias salvedades pendientes.