En una carta dirigida al Ministro de Agricultura, Aurelio Iragorri Valencia, el presidente del Comité de Ganaderos de Norte de Santander solicita mayor inversión para la entidad en este departamento, debido al alto riesgo que presenta la zona por el contrabando de reses.   Andrés Hoyos Arenas, presidente de Coganor, redactó la misiva debido a la coyuntura que está viviendo el país tras el reciente brote de fiebre aftosa que se produjo en Tame, Arauca, el pasado 23 de junio.   El dirigente sostuvo que gran parte del departamento no hace parte del mapa nacional de libre de fiebre aftosa con vacunación, estatus que el país ostentó durante 8 años hasta que se descubrió el contagio el mes pasado. (Lea: Trazabilidad estancada en zonas susceptibles a Aftosa)   Desde hace 5 años, los productores llevan solicitando al ICA los estudios epidemiológicos para eliminar el estado de “zona de protección” de los 30 municipios que hacen falta y declararlos en la zona libre de aftosa.   Luego de muchas insistencias lograron la aplicación de los exámenes que han arrojado unos primeros resultados muy promisorios, pero ahora que están a un paso de lograr este objetivo, temen que un fenómeno como el de Arauca se repita en Norte de Santander.   Ambos departamentos ubicados en zona limítrofe con Venezuela, son los más afectados por el flagelo del contrabando y del sacrificio ilegal. (Lea: Ganaderos en frontera también habían advertido sobre posible brote de aftosa)   No cabe duda que los pobladores están consumiendo carne de semovientes provenientes del vecino país, pues no de otra forma se explica la dramática reducción en el faneamiento de animales que se realiza en la planta de Friogán en Cúcuta, que durante el mes de junio tuvo un promedio de 13 animales sacrificados al día, generando pérdidas por $90 millones mensuales.   Por este motivo, la comunicación hace hincapié en la necesidad de reforzar los controles en toda la frontera, solicitando no solamente el incremento en el presupuesto sino también en el personal que se encargue de realizar las tareas de expedición de guías y trazabilidad.   “Le queremos pedir que la dependencia del ICA en el departamento sea priorizada con los recursos económicos y de talento humano suficientes, y su manejo se blinde de las cuotas políticas que allí son cotidianas, en el entendido de que la sanidad animal no puede manejarse con ese criterio”, precisa la carta.   Hoyos Arenas recordó que no solamente se trata de prevenir la entrada de bovinos infectados por fiebre aftosa, sino también el ingreso de otras enfermedades como la peste porcina clásica o la encefalitis equina. (Lea: Coganor cuestiona forma de recompensar pronto pago de Vecol)   Lo mismo solicitó para la Policía Fiscal Aduanera, pues como lo ha expresado en varias ocasiones, solamente un trabajo coordinado entre las distintas instituciones, tanto la Fuerza Pública como las entidades sanitarias, pueden controlar el ingreso desenfrenado de semovientes ilegales.   En anteriores declaraciones, el líder gremial ha señalado que la falta de presupuesto ha evitado la ejecución eficiente de programas como la expedición de guías o la trazabilidad, medidas que hacen falta para controlar el contrabando.   CONtexto ganadero intentó comunicarse con el gerente de la seccional para conocer sus apreciaciones sobre la solicitud, pero hasta el momento de la publicación no fue posible el contacto. (Lea: Norte de Santander espera dejar de ser zona de protección este año)