La Sociedad Rural de Tucumán en Argentina se convirtió en la caja de resonancia de la ganadería argentina ya que allí se reunieron especialistas de distintos ámbitos convocados por el Instituto de Promoción de la Carne Vacuna, PCVA, en el marco de un seminario ganadero. Más de 2 centenares de productores de la región participaron en las disertaciones dadas por especialistas del Instituto, el INTA, Asociación Argentina de Consorcios Regionales de Experimentación Agrícola, AACREA, el Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas, CONICET, y asesores privados. En la parte medular del seminario, los consejeros del IPCVA, Dardo Chiesa (producción) y Jorge Torelli (industria), expusieron sus perspectivas sobre la carne argentina en el mercado domestico e internacional ante un cambio de gestión de gobierno. (Lea: Argentina rompe récord en consumo de carne por habitante al año) Al comenzar su análisis, Chiesa recordó que Argentina perdió más de 10 millones de cabezas de ganado bovino en la última década sin bien fue optimista al decir que actualmente la faena de hembras bajó al 41 %. "Esto es bueno, porque demuestra que el productor comienza a retener vientres y se robustece la fábrica de terneros", dijo. Frente a este nuevo escenario, Chiesa dijo que hay que mirar atentamente todos los indicadores para determinar cuáles son los 2 o 3 puntos por donde tienen que pasar los reclamos del sector porque "estamos en un momento en que va a cambiar el Gobierno y se deben modificar las reglas de juego". Según cuenta el especialista, algunas de las medidas para apoyar la recomposición ganadera deberían estar relacionadas con una actualización del tipo de cambio, la salida del cepo cambiario y la eliminación de las retenciones a la exportación de carne. "Es importante tener en claro lo que somos para poder valorar lo que hay que hacer en materia de ganadería en el país para los tiempos que se avecinan y sobre todo frente a las nuevas posibilidades que ofrecen mercados como por ejemplo los de Estados Unidos y Canadá", aseguró Chiesa. Así, anticipó que se espera una expansión del consumo de carnes del 12 % para la próxima década, de acuerdo a datos del Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA por sus siglas) lo que en números representa nada menos que 2,2 millones de toneladas. (Lea: América Latina se posiciona como el segundo mayor productor de carnes) Desde la industria, Jorge Torelli planteó su visión del panorama mundial de la carne y advirtió que en 2050 será necesario producir 100 millones de toneladas de carne vacuna para abastecer la demanda mundial de 9 mil millones de habitantes. "No todos van a comer carne, pero una pequeña parte de esa población sí lo va a hacer, que en valores absolutos es un gran número, y la demanda va a superar ampliamente a la oferta. Al ocurrir esto vamos a ver mucha tensión y volatilidad en los precios de la carne en los mercados internacionales y también en la Argentina, que integrada al mundo no podrá escapar a ese escenario", aseguró. Agregó que "no obstante, aunque para muchos observadores tener un mercado interno que consuma un altísimo porcentaje de la producción de carne es una debilidad, nosotros creemos que es muy importante".