Luego de ese veredicto, la plataforma y el territorio marítimo de Nicaragua deberá cubrir un área estimada en 152.130 km2, por lo cual deberán hacerse las modificaciones correspondientes y registrar "estos cambios trascendentales", dijo el director jurídico de la Cancillería, César Vega.
Vega hizo el anuncio durante una sesión solemne del parlamento para celebrar el fallo "histórico", con presencia de todos los poderes de Estado, los mandos del Ejército, la Policía y miembros del cuerpo diplomático.
La CIJ decidió el lunes que "Colombia y no Nicaragua tiene soberanía" en al menos media docena de cayos, pero amplió las fronteras marítimas nicaragüenses hacia el este del mar Caribe, formando una especie de herradura en torno a las islas de San Andrés y Providencia, que permanecieron con soberanía colombiana.
El mandatario de Colombia, Juan Manuel Santos, rechazó el mismo lunes la delimitación marítima aprobada en La Haya, que además así estableció un radio de sólo 12 millas náuticas alrededor de los cayos colombianos de Serrana y Quitasueño.
El presidente del legislativo nicaragüense, René Núñez, reiteró que el gobierno del presidente Daniel Ortega acatará el fallo de la CIJ e instó a Colombia a aceptarlo y a que "sigamos viéndonos como hermanos, respetando el derecho internacional".
El experto nicaragüense en derecho internacional, Mauricio Herdocia, criticó la postura Santos ya que esa delimitación "es el reacomodo más impresionante" en la historia marítima de las naciones.
"El rechazo de una sentencia (de la CIJ) no solo afecta a las partes involucradas, sino a la comunidad internacional (...) y le corresponde a esa comunidad reclamar su cumplimiento", subrayó Herdocia.
El diferendo había comenzado en 1928 cuando Managua cedió a Bogotá las islas San Andrés y Providencia con la firma del tratado Bárcenas-Meneses Esguerra, ratificado en 1933 cuando Nicaragua estaba intervenido por Estados Unidos.
En 1969 Colombia pretendió establecer su límite con Nicaragua en el meridiano 82, lo que Managua rechazó alegando que el tratado no fijó límites y que esa decisión cercenaba su plataforma continental en el Caribe. En 1980, Nicaragua declaró nulo el tratado.
En 2001, Nicaragua disputó a Colombia ante la CIJ su soberanía sobre el archipiélago, pero seis años más tarde, el tribunal reconoció la soberanía colombiana sobre San Andrés, Providencia y Santa Catalina y se declaró competente para dirimir la delimitación marítima entre los dos países y definir la soberanía de los cayos.