El sector ganadero espera que el acuerdo tenga luz verde por los beneficios que traerá, por constituir la puerta de entrada a Asia del Pacífico. Ambos países ya han pactado contingentes para carne y leche.

El TLC con Corea del Sur sufrió un tropiezo en junio de 2014 a raíz de su hundimiento en el Congreso. Sin embargo, por su conveniencia para el sector agropecuario se tomó la decisión de presentarlo de nuevo. Y fue así como el pasado 3 de diciembre regresó la esperanza para el sector y la posibilidad de exportación de productos cárnicos y lácteos de bovino.

Cecilia Álvarez Correa-Glen, ministra de Comercio, Industria y Turismo, agradeció a los congresistas por la decisión tomada, al afirmar en comunicado del MinComercio, la posibilidad  en materia agropecuaria que se tiene, bajo la premisa de que en 2013 las importaciones coreanas de productos de este sector sumaron USD 26 mil millones. (Lea: Retos del Congreso con la ganadería colombiana y la aprobación de TLC)

“Lo que necesitamos es exportar estos productos agroindustriales. Corea necesita de bienes agropecuarios, así que se trata de una oportunidad grande para nuestra agricultura y queremos abrir ese mercado”, asevero la ministra.

Por su parte, José Félix Lafaurie, presidente ejecutivo de la Federación Colombiana de Ganaderos, Fedegán, manifestó que “después de la apertura de los años 90, el país ha venido avanzando en la internacionalización de la economía, la cual llevó al sector rural a ocupar la esquina débil de la parte colombiana, y a aceptar términos y condiciones que para el sector rural no eran las mejores; cediendo en favor de sectores modernos y urbanos de la economía colombiana, escenarios mucho más ofensivos”.

Añadió que en el caso concreto de Corea, por el contrario, “se tendrían inmensas ventajas que vendrían a compensar los TLC firmados con Estados Unidos, la Unión Europea, México y el Triángulo Norte (Guatemala, el Salvador y Honduras)”.

El presidente ejecutivo del gremio cúpula de la ganadería bovina resaltó que las economías del continente asiático se han desarrollado de manera vertiginosa en los últimos años y en la actualidad es uno de los motores de crecimiento en el mundo.

“Sus países son muy dinámicos y representan el 34 % del Producto Interno Bruto del mundo”, resaltó Lafaurie.

En ese sentido, mencionó que “en hora buena, la decisión de profundizar la agenda con Asia se sustenta en la propuesta del Consejo Superior de Comercio Exterior, de negociar acuerdos con países como Japón, China, Singapur, Malasia e India, entre otros”. (Lea: Caída del TLC con Corea del Sur estanca la ganadería colombiana)

De esta forma, “el TLC con Corea, permitirá a los colombianos acceder a un mercado de casi 50 millones de consumidores con un nivel de PIB per cápita similar a la Unión Europea como región, y superior 3 veces al nuestro”, dijo Lafaurie.

Augusto Beltrán Segrera, secretario técnico del Fondo de Estabilización de Precios, FEP-Fedegán, indicó que Colombia se convertirá en el “verdadero ganador del TLC”, debido a que Corea del Sur sería la entrada al mercado de Asia del Pacífico, “la otra mitad del mundo, que hasta ahora ha sido inalcanzable para el sector”.

Carne y leche, gran oportunidad

Beltrán Segrera aseguró que Colombia puede satisfacer las necesidades cárnicas del país asiático: “Lograr que la carne colombiana tenga presencia en el mercado surcoreano se convertirá en un paso fundamental en el proceso de internacionalización del sector, al satisfacer una demanda creciente, tanto en tamaño de mercado como en poder adquisitivo de sus habitantes”.

Esta posibilidad será factible, dijo el secretario técnico del FEP-Fedegán, si se cumplen las exigencias del Gobierno surcoreano dentro del proceso de admisibilidad sanitaria.

“Si bien el TLC abre una oportunidad en términos comerciales al reducir la tarifa arancelaria, es el cumplimiento sanitario el que verdaderamente abre el mercado”,  aseveró.

En cuanto a productos lácteos manifestó que más del 90 % de los pequeños productores de Colombia “viven de las precarias rentas, tanto del engorde del ganado como de la producción de leche”. (Lea:Colombia busca identificar la forma de aprovechar los TLC)

Enfatizó en que los ganaderos producen más leche de la comercializada a la industria y esta tendría espacio en Corea del Sur: “Alrededor del 50 % de la producción diaria de leche queda por fuera del acopio industrial, repercutiendo por supuesto, en bajos precios al productor que lo someten a diario a sobrellevar las penurias de la pobreza rural”.

Visión de la negociación con Corea del Sur

De acuerdo con el presidente ejecutivo de Fedegán, la perspectiva de una negociación con Corea del Sur resulta muy promisoria a la luz de sus cifras macroeconómicas.

“En 2011, ocupó el puesto 16 a nivel mundial en términos de Producto Interno Bruto, PIB, el cual fue equivalente a 1,6 % del PIB global”, detalló.

Son USD1.116 millones que suman 3.4 veces el de nuestro país, que para esa fecha alcanzó USD 328,4 miles de millones. Pero además las perspectivas de crecimiento de su economía para el período 2014-2017 se estima en 3.9 % anual, motivado por una demanda doméstica muy dinámica.

Todo esto sin contar con su sostenido y altísimo ingreso per cápita que se estima entre USD 32 mil y USD 33 mil para 2013; en la inflación que ronda el 2 % y un desempleo en descenso.

Contingentes aprobados

Cuando se aprueban y entran en vigencia acuerdos entre países se otorgan beneficios en cuanto a cupo de contingentes concedidos de productos a comercializar  y a los aranceles. (Lea: Estos son los requisitos sanitarios para exigidos por Corea para comprar carne colombiana)

En el caso de TLC con Corea del Sur, ambos países se otorgaron un contingente de 9.900 toneladas de carne de bovino con crecimiento anual de 2 % y una desgravación a 19 años. Pasado ese tiempo habrá libre comercio.

Los 2 mercados se concedieron un contingente de 100 toneladas para leche en polvo y canastas de degradación a 10 años para yogur y lactosuero, y de 16 años para quesos, arequipe, crema de leche y pastas lácteas para untar.  Además, un acceso inmediato para las bebidas lácteas.