La medida empezó a regir desde la semana pasada en una cadena conocida como Kroger, a la que se le sumó Cotsco el pasado lunes.
La situación que vive Estados Unidos a causa de la COVID-19 y el gran número de casos que hay en el país (más de 1,2 millones de enfermos), viene afectando seriamente algunos sectores como es el de la carne. (Lea: Así sería el efecto del COVID-19 para el agro)
Eso llevó a que la semana pasada, según informó CNN, la cadena Kroger –la más grande de supermercados en EE.UU.– estableciera límites a la hora de vender carne fresca de res, pollo y cerdo a sus clientes, debido a que las plantas de beneficio han tenido que suspender temporalmente la operación debido a muchos de sus empleados se han enfermado.
Esa misma decisión fue adoptada por Costco, otra gran cadena víveres, la cual desde el pasado lunes limitó la venta de res, pollo y cerdo a 3 productos, con el fin de garantizar que más personas puedan acceder a las diversas proteínas.
Sin embargo, el medio indicó que el sindicato United Food and Commercial Workers International sostuvo que la semana pasada al menos 20 trabajadores de empacadoras de carne y de procesamiento de alimentos han muerto hasta el momento. La organización señaló también que los cierres han resultado en una reducción del 25 % en la capacidad de carne de cerdo y una reducción del 10 % en la capacidad de carne de res. (Lea: La COVID-19 y su relación con la industria cárnica)
Pese a ese panorama, el presidente Donald Trump firmó el pasado 29 de abril un decreto con el fin de obligar a las plantas procesadoras de carne a permanecer abiertas en medio de la pandemia. Las operaciones en al menos 13 de estas instalaciones han sido suspendidas indefinidamente debido los contagios de coronavirus entre sus empleados.
Aunque las medidas de Trump son cada vez más fuertes, Tyson Foods advirtió este lunes que espera más cierres de plantas de carne este año. La compañía también indicó que continuará produciendo menor cantidad de carne de lo habitual, ya que los trabajadores se abstienen de asistir al trabajo durante el brote. La pandemia ha reducido a la mitad la capacidad de procesamiento de cerdo en el país, señaló Tyson en su informe de ganancias.
Brasil también sufre con los casos en las plantas de sacrifico
Nueve plantas frigoríficas en el estado brasileño de Rio Grande do Sul confirmaron 124 casos del Covid-19 entre el 20 de marzo y el 27 de abril de este año, según informó el Boletín Epidemiológico, publicado por el Departamento de Salud del estado. (Lea: Conozca las medidas para afrontar la crisis del COVID-19 en el campo)
Los casos se detectaron en una planta frigorífca de la ciudad de Passo Fundo, uno en Marau, dos en Garibaldi, dos en Lajeado, uno en Carlos Barbosa, uno en Encantado y uno en Tapejara, según datos del gobierno estatal que no nombró todas las unidades.
Sin embargo, JBS y BRF están entre las empresas que ya confirmaron casos del virus en plantas frigoríficas de la región.
La semana pasada, la unidad de JBS Aves en Passo Fundo suspendió sus operaciones tras confirmar 20 casos del Covid-19 entre sus empleados; y, según informaciones del boletín, otra planta frigorífica en esa ciudad confirmó 43 casos del virus. (Lea: Así será el impacto del COVID-19 en la economía mundial)