La oferta de ganado gordo sigue muy reducida y las lluvias la complicarán más. Algunos frigoríficos ya pagan por encima de US$ 3,60 por kilo y aún así no consiguen ganado. El pasado lunes la Federación Rural se reunió con el sindicato de la industria.
Más allá de la baja oferta, el mercado de haciendas gordas en Uruguay muestra una tremenda incertidumbre. La semana pasada hubo que sacar los ganados de las praderas y verdeos por las lluvias y eso paralizó prácticamente las ventas; ahora el ganado recupera el estado corporal perdido ante los temporales.
Los pocos negocios que se están concretando se hacen en base a algunos frigoríficos que salieron a pagar por arriba de los US$ 3,50 que ofrecían -hay algún negocio a poco más de US$ 3,60 por kilo de carne- y aún así, no consiguen ganado. "El mercado tiene hoy más demanda que oferta y eso provocó correcciones al alza en los precios", aseguró a El País el consignatario Gustavo Basso.
La incertidumbre está dada por no saber si los frigoríficos van a seguir acompañando esa suba de precios o si el aumento fue fruto del desabastecimiento sufrido.
Los consignatarios aseguran que es el mercado interno el que está sosteniendo los precios al alza del ganado y como valores de referencia manejan US$ 3,60 para novillo gordo, hasta US$ 3,40 por vaca gorda y hasta US$ 3,50 para vaquillonas (en todos los casos por kilo de carne en segunda balanza). (Lea: Uruguay recibe alta calificación en materia de bienestar animal)
"Hacía muchos años que no se veía un faltante de ganado tan pronunciado. Cuando llegaba esta época del año los ganados más bien bajaban de precio y hoy los US$ 3,40 o US$ 3,50 que la industria pagaba por el novillo quedaron atrás", sostuvo el consignatario Walter Hugo Abelenda.
El operador estimó que la oferta no crecerá hasta pasada la primera quincena de septiembre, porque "los engordes se atrasaron". El clima de incertidumbre que se generó provocó que el productor encerrara menos animales que el año pasado, porque en muchos casos, la industria no se quiso comprometer con un precio por miedo a los cambios en el mercado internacional. (Lea: Lanzarán nuevas pólizas de seguros para ganaderos)
Reunión clave
Mientras tanto, la Federación Rural se reunió ayer con la Federación de Obreros y Empleados de la Industria Cárnica (Foica).
El presidente de la Federación Rural, Carlos María Uriarte, afirmó que "los trabajadores de la Foica manifestaron que hay industrias que trabajan a media máquina y eso genera gran preocupación por las fuentes laborales. Esta situación también nos afecta a los productores, ya que tiene como consecuencia una baja en el precio del ganado". (Lea: Argentina busca aumentar su producción de carne con un DIU bovino)
Uriarte indicó que hay una decisión concreta de los frigoríficos de reducir el número de ganado que entran a planta para así bajar las cotizaciones del mercado. Explicó que si bien comprende que son reglas de mercado, "son cosas que no le hacen nada bien a la cadena cárnica".
Desde la industria frigorífica negaron rotundamente estas acusaciones. El presidente de la Asociación de Industrias Frigoríficas del Uruguay (Adifu), José Costa, indicó que la causa de la baja en la faena se debe a que no hay ganado. "Alcanza con ver los precios que se ofrecen. Semana a semana aumentan los valores y sin embargo la faena sigue cayendo. Si desde la industria quisiéramos regular los valores no aumentaríamos la cotización de las haciendas", sostuvo el titular de Adifu.
Por otra parte, en el encuentro entre la Federación Rural y los directivos de la Foica, hubo coincidencia en mantener abierta la exportación de ganado en pie. (Lea: El consumo per cápita de carne bovina en Uruguay supera los 60 kilos por año)
"Nos manifestaron que ven bien esta herramienta, mientras no se superen las 200 mil o 250 milcabezas anuales. Este número no representa un problema para ellos, ni un factor que quite mano de obra a la industria", dijo Uriarte.