Durante 2015, el país tico logró que el 98,82 % de la energía eléctrica que se usó, fuera a partir de fuentes limpias y amigables con el ambiente. Hidráulica, geotérmica, eólica, biomásica y solar, son las opciones usadas en la nación centroamericana.
Apostarle a las energías amigables con el medio ambiente es un reto que tienen todos los países. Unos están más comprometidos que otros, entre los más destacados está Costa Rica. La nación del Caribe reveló en días pasados que el 98,82 % de la energía eléctrica que fue consumida por sus habitantes, venía de fuentes renovables y amigables con el ambiente. (Lea: Presentan guía gratuita sobre el uso de energías renovables)
La Institución Costarricense de Electricidad, ICE, entidad encargada de distribuir el servicio, dio a conocer los principales logros obtenidos durante 2015. El más importante, el hecho que la mayoría de la población tenga el servicio de energía sin necesidad de que este provenga de fósiles, sino que todo es gracias a otras alternativas amigables.
Según explicó la compañía, durante el año anterior, la energía que usaron los costarricenses provino de fuentes como la hidráulica, geotérmica, eólica, biomásica y solar, lo que permitió que durante 250 días la electricidad que se usó en el país fuera totalmente renovable.
Al no usar combustibles fósiles para generar energía, la empresa pudo recuperar 5.838 hectáreas de cobertura boscosa y 4 viveros forestales; a los que se suma la siembra de 9 millones 500 mil árboles durante la última década. (Lea: El Vaticano, un nuevo aliado de las energías renovables)
En 2015, fueron cultivados 37 mil 152 robles sabana, 40 mil 285 cedros amargos, 46 mil 227 cortez amarillo y 129 mil 627 sotacaballos. Además, se lograron recuperar 3 cuencas en las que se ubicaron 510 mil 314 variedades de árboles. Todo ello permitió acumular 330 mil toneladas de dióxido de carbono, gracias a los bosques.