La Universidad Nacional de Colombia, UN, hizo un estudio de degradación de materia orgánica y reducción de dióxido de carbono para que con la luz solar se eliminen sobrantes orgánicos contaminantes del aire y fuentes hídricas.

En ríos, quebradas y el aire se hallan residuos de pesticidas, detergentes y colorantes orgánicos difíciles de remover. Ahora, con el estudio hecho por estudiantes y docentes de la UN se podrán depurar en menos tiempo y mediante un proceso más sencillo.

Néstor Eduardo Mendieta Reyes, estudiante del Doctorado en Ciencias Químicas de la Universidad Nacional, quien trabaja con el grupo de investigación Electroquímica y Termodinámica Computacional, en Bogota dijo: “Para esto se utiliza el dióxido de titanio (TiO2) un semiconductor económico e inofensivo para el ambiente que se encuentra abundantemente en la naturaleza. Este material, sensible a la luz, absorbe radiación electromagnética en la región del ultravioleta y puede producir la degradación de los compuestos contaminantes”.

La reducción de los contaminantes está limitada a la necesidad de usar luz ultravioleta, lo cual invita a los investigadores a probar de manera controlada “impurezas de nitrógeno para que su actividad catalítica no requiera de lámparas de luz ultravioleta, sino que pueda darse con luz visible”. (Lea: Uso de etanol en la gasolina reduce contaminación)

Este proyecto tendrá impacto positivo en el medio ambiente y, por ende, en el contexto económico y social, como lo harán las 10 estaciones metereológicas de la red del río Quindío con las que se pretende reducir la contaminación del agua que corre por ríos y quebradas.

Dicho proyecto busca proteger más caudales del departamento y en esa misión trabaja la Corporación Autónoma Regional del Quindío que invertirá $400 millones.

Sandra Milena Gómez Fajardo, directora general de la Corporación, señaló que los afluentes se podrán monitorear para solucionar los problemas de contaminación, basados en datos y cifras exactas que arrojan las estaciones, las cuales llevaban 20 años sin uso. (Lea: Humedales construidos, el nuevo reto tecnológico para preservar el agua) 

“Medir niveles, precipitaciones, temperaturas y demás factores es fundamental para conocer el comportamiento del río y cómo administrar los recursos que nos brinda en épocas de invierno y verano respectivamente", enfatizó Gómez Fajardo.