Nelson Huerta, médico veterinario de Venezuela, dio apertura al último día del II Seminario Internacional del Sector Cárnico Bovino.

En el Centro de Convenciones de Montería, Córdoba, Huerta dictó una conferencia sobre el rol de la Usmef en la inserción exitosa de Estados Unidos como jugador de talla mundial.

Después de la enfermedad de la vaca loca, Estados Unidos se enfoca más en el proceso de inocuidad con la aplicación rigurosa de la reglamentación de clasificación de la carne.

"Hubo un bajón en 2004 por el mal de la vaca loca que ha cobrado al país en temas de salud pública. Por eso es importante la inocuidad", señaló el experto internacional.

Ante eso aseguró que la clasificación y gradación es la herramienta más útil para comercializar carne de bovino con transparencia en calidad y precios. (Lea: Colombia casi triplica exportaciones de carne de res en 2013)

En el país norteamericano clasifican la carne de res en las categorías prime, choice y select, para coordinar los mercados, crear confianza en el consumidor y generar marca.

"En Estados Unidos tenemos 5 grados de rendimientos de cortes. El 1 es el mejor", explicó Huerta, quien añadió que la clasificación es el "lenguaje común" entre exportadores, importadores y frigoríficos porque todos se enteran del proceso de venta del producto.

La carne inocua y nutritiva es a lo que le apuestan los grandes exportadores que han comprendido que el consumidor impulsa la reorganización de la cadena productiva de la carne roja en todo el mundo.

Argentina provee su mercado interno

Miguel Jairala, del IPCVA, compartió un informe sobre el consumo de carne bovina en la Argentina, como determinante económico y cultural.

Los argentinos consumen 63 kilos de carne de res al año, cifra alta comparado con países en desarrollo, aunque baja si se evalúa el consumo en los años 80 que fue de 80 kilos en la nación suramericana. (Lea: Colombia debe trabajar la trazabilidad para llegar a mercados más exigentes)

Argentina exporta un poco más de 200 mil toneladas al año, pero enfoca su comercialización al mercado interno, según Jairala, porque "para ser competitivos en el exterior hay que serlo primero en casa y es la salvación si no se puede sacar el producto".

Pablo Caputi, consultor internacional se dirigió a los asistentes para dar una segunda conferencia sobre las posibilidades que tiene Colombia en el mediano y largo plazo para mantenerse en el negocio de la exportacion. Para él es fundamental que se trabaje con esmero para llegar a ser grandes comercializadores. Además, el país tiene la ventaja de producir casi 1 millón de toneladas de carne de res al año con lo que puede satisfacer la demanda nacional y del exterior.

"Colombia puede ser un gran exportador porque ya es un gran productor", enfatizó Caputi.

De esta forma, indicó que se puede aumentar la producción y el sacrificio, mejorando el engorde, el destete, la cría de novillos y el bienestar animal.

Con estas dos conferencias finalizó la jornada de la mañana del II Seminario de la Carne, este 27 de noviembre.

En hora de la tarde, José Félix Lafaurie, presidente ejecutivo de la Federación Colombiana de Ganaderos, Fedegán, cerrará el evento que congrega a más de 700 personas.