En un escenario de creciente variabilidad climática y de vulnerabilidad, la demanda de alimentos aumentará en cerca de un 50 %, según proyecciones realizadas por la FAO-OCDE para el año 2050, indicadores que generan un resto para la producción chilena.
“Tenemos que producir más, pero tenemos que aumentar e innovar en la tecnología para cuidar al medio ambiente”. Con estas palabras, el ministro de Agricultura de Chile, Antonio Walker, se refirió a uno de los principales desafíos que tiene la agricultura durante su exposición en el seminario “Soluciones basadas en la naturaleza para la estrategia climática de largo plazo”. (Lea: ¿Sabe de qué se trata el concepto de ganadería regenerativa?)
Debido a la pandemia de la COVID-19 que afecta a Chile y al mundo, el encuentro organizado por la ministra de Medio Ambiente, Carolina Schmidt, fue vía videoconferencia y difundida a través de las redes sociales, donde contó con la presentación del titular de la cartera de Agricultura, Antonio Walker y el Premio Nobel de la Paz 2007, Rattan Lal.
“Lo que estamos haciendo en Chile es construir la política climática como una política de estado. Es decir, impulsar un proyecto de ley de cambio climático que hoy está en discusión en suma urgencia en el senado y que establece la meta de lograr la carbono neutralidad y resiliencia a más tardar el año 2050 institucionalizando la acción climática en nuestro país, estableciendo las facultades, las obligaciones y las responsabilidades de cada órgano del estado”, explicó la ministra de Medio Ambiente, Carolina Schmidt, durante su introducción al seminario.
Tras la introducción, el titular del Agro, abordó durante 20 minutos las formas de mitigación y adaptación al cambio climático donde la autoridad destacó la importancia de avanzar en una agricultura regenerativa, a través de la imitación de procesos naturales y aportando a la conservación y restauración de ecosistemas. “Las soluciones basadas en la naturaleza permiten al sector silvoagropecuario producir alimentos y productos forestales de forma sostenible y a la vez reforzar su rol como actor clave para la generación de servicios ecosistémicos para la sociedad”, destacó Walker. (Lea: Para iniciar con ganadería regenerativa, basta con dejar que la naturaleza actúe)
Disminuir residuos orgánicos y quemas por incorporación a los suelos, aumentar la resiliencia de ecosistemas agrícolas y contar con suelo sanos que retienen más agua son parte de los beneficios de la agricultura regenerativa mencionados por el ministro Antonio Walker, donde la meta principal es ser un país carbono neutral y resiliente al 2050. El Premio Nobel de la Paz 2007, Rattan Lal, coincidió con el titular del Minagri, durante su intervención en cuanto a la importancia de la agricultura regenerativa, por su impacto para el desarrollo sostenible y cambio climático.
“La agricultura regenerativa tiene por objeto restablecer la salud y funcionalidad de suelos y ecosistemas degradados, mejorando el contenido de materia orgánica del suelo, a través de la creación de un presupuesto de carbono positivo del ecosistema del suelo. La misión de la agricultura regenerativa es producir más, a partir de menos; menos tierra, menos agua, menos productos químico y energía importados, menos emisiones de gases de efecto invernadero y menos pérdida de capital natural”, señaló el Premio Nobel de la Paz 2007, Rattan Lal.
Finalmente, el secretario Walker reiteró su compromiso en la contribución a la estrategia climática de largo plazo. “Tenemos que ir produciendo alimentos, tenemos que ir desarrollando esta agricultura de alimentos saludables respetando nuestro entorno, respetándonos a nosotros mismos y ese es el gran desafío que tiene la agricultura mundial y en particular la agricultura chilena. Queremos ser parte de la solución del cambio climático y no queremos ser parte del problema”, concluyó. (Lea: Ganaderos en Colombia le apuestan a la ganadería regenerativa)