Durante la última semana de marzo, el equipo técnico de la FAO efectuó una intervención en varios departamentos del país que presentan una condición endémica para esta enfermedad, que amenaza la seguridad alimentaria y la salud pública de los pobladores rurales.   El objetivo central de la misión de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura, FAO, en Bolivia, consistió en definir el alcance y los criterios para el fortalecimiento del Programa Nacional de Gestión de Riesgos de la rabia paralítica bovina, RPB, del Servicio Nacional de Sanidad Agropecuaria e Inocuidad Alimentaria, Senasg, el cual se encuentra en la etapa de revisión. (Lea: Organismos de la salud humana y animal se unen contra la rabia)   Durante el desarrollo de la agenda se llevaron a cabo una serie de encuentros con  las autoridades del Senasag del nivel central y departamental, y del laboratorio de diagnóstico oficial Lidivet, con el propósito de analizar los criterios epidemiológicos necesarios de cara a establecer estrategias diferenciadas en  las zonas catalogadas como de alto riesgo en aquellas regiones endémicas.   Además de estas reuniones, se llevó a cabo un encuentro entre los funcionarios de la FAO y los miembros de los Servicios Veterinarios Territoriales, pertenecientes a los gobiernos autónomos de los departamentos priorizados, en donde se caracterizaron las estrategias sanitarias de esos programas departamentales. En esa etapa del proceso hubo apoyo del sector privado, representado por la Federación de Ganaderos de Santa Cruz, Fegasacruz. (Lea: 14 enfermedades sin control oficial atacan al ganado en Colombia)   La revisión de la estrategia propuesta por el Senasag  y de los planes sanitarias departamentales, resultó fundamental para avanzar en el fortalecimiento de un programa oficial  nacional de rabia bovina, que articule y armonice la gestión de riesgos entre todas instituciones  involucradas, en base a las características del sistema veterinario de Bolivia.   En función de los componentes que constituyen una estrategia de gestión de riesgos de RPB, se logró definir la adopción de las medidas necesarias de manera proporcional a la valorización del riesgo determinado. (Lea: Municipio de Trinidad cumple 7 años sin brotes de rabia bovina)   Las actividades venideras comprenden entre otras, el desarrollo de un programa de capacitación virtual y presencial, que permitirá ampliar las capacidades institucionales para una adecuada gestión de una estrategia sanitaria de prevención y control.