Unas 3.000 hectáreas de vegetación, incluidas extensas zonas de bosques nativos, fueron afectadas en el sur chileno por incendios forestales que mantienen en alerta a cuatro regiones del país, informó el lunes la Oficina Nacional de Emergencia (Onemi). Un año después de los peores incendios forestales de las últimas décadas, los equipos de emergencia chilenos trabajan para combatir varios focos en la región del BioBío, Los Ríos, Los Lagos y La Araucanía, donde se mantiene activo en la comuna de Ercilla un siniestro "que afecta una superficie por confirmar de 2.069 ha (hectáreas) de vegetación", informó la Onemi. De un "total de incendios forestales activos registrados a nivel nacional (30), 11 se encuentran en combate, 18 fueron controlados y 1 se encuentra extinguido", detalló la entidad en un comunicado. Brigadistas forestales, helicópteros y aviones de la Corporación Nacional Forestal (Conaf) forman parte del operativo desplegado para sofocar las llamas y evitar su propagación a zonas pobladas. El megaincendio forestal que afectó el centro-sur del país entre mediados de enero y principios de febrero del año pasado consumió unas 467.000 hectáreas, con un costo de 26,5 millones de dólares. El cambio climático, que elevó las temperaturas a niveles récord en esa zona de Chile, habría influido en la rapidez del avance de las llamas, que en la mayoría de los casos se originaron en incendios intencionados.