El secuestro es uno de los delitos más atroces y dolorosos que puede enfrentar una persona, y en Colombia, los ganaderos se han visto como blanco frecuente de estas organizaciones criminales. Para ayudar a prevenir este crimen y proteger tanto a los ganaderos como a la población civil en general, el General (r) Fernando Murillo, experto en seguridad y exdirector Antisecuestro de la Policía Nacional, ha compartido recomendaciones clave basadas en su vasta experiencia en este campo.
¿Quiénes están detrás de un secuestro?
Una de las primeras lecciones que el General Murillo destaca es que el secuestro no es solo una amenaza externa; en muchos casos, la información que lleva a la víctima a ser secuestrada proviene de personas cercanas a ella.
“En la gran mayoría de veces, son personas cercanas a la víctima quienes entregaron la información a la organización delincuencial”, afirma Murillo.
Esto significa que el círculo de confianza del secuestrado —empleados de larga data, socios, amigos e incluso familiares— podría ser la fuente de la información que conduce al secuestro. De hecho, uno de los momentos más dolorosos para una víctima, después de ser liberada, es enterarse de que personas en las que confiaba pudieron haber colaborado con los secuestradores.
Consejos de prevención para evitar ser víctima de un secuestro
El General Murillo ofrece una serie de recomendaciones prácticas para reducir el riesgo de ser objetivo de este crimen. Aunque no existen garantías absolutas, seguir estos pasos puede ayudar a minimizar las oportunidades de los secuestradores.
1. Cuidado con la información en redes sociales
El uso indiscriminado de redes sociales puede ser una fuente de información invaluable para los delincuentes. Las fotos, videos y detalles sobre la vida privada, especialmente si muestran signos de riqueza o actividad económica, pueden ser utilizados por organizaciones criminales para seleccionar a una víctima.
"Es importante evitar difundir en redes información financiera o privada", advierte Murillo.
La exposición en redes debe manejarse con precaución, y es vital ser selectivo con lo que se publica.
2. Estudio de seguridad del entorno laboral
Es crucial evaluar la seguridad de las personas más cercanas, especialmente aquellos involucrados en la actividad económica o laboral de la víctima potencial. Esto incluye a empleados, socios y otros colaboradores.
“La delincuencia obtiene información muchas veces de personas dentro del círculo laboral, por lo que es fundamental revisar el entorno cercano”, señala el General Murillo.
Realizar controles de seguridad y mantener un monitoreo sobre posibles riesgos internos es una práctica fundamental.
3. Evitar rutinas predecibles
Tener una rutina diaria fija puede facilitar a los delincuentes planificar un secuestro. Por eso, es recomendable cambiar los horarios y rutas de desplazamiento con frecuencia.
"No tener rutinas predecibles es una de las mejores formas de complicar la labor de los secuestradores", explica Murillo.
Este consejo aplica tanto para ganaderos como para cualquier ciudadano que quiera prevenir un ataque.
4. Comunicación familiar y plan de acción
Hablar sobre la posibilidad de un secuestro con la familia puede parecer incómodo, pero es necesario. Tener un plan de acción claro en caso de que ocurra esta situación es vital para minimizar los daños.
"Es fundamental que la familia sepa cómo actuar, a quién acudir y con quién hablar en caso de un secuestro", aconseja el General.
Este tipo de preparación puede hacer una gran diferencia en momentos de crisis.
5. Confiar en la institucionalidad
Colombia ha desarrollado una capacidad destacada para atender casos de secuestro. Las autoridades, con su experiencia y recursos, son un aliado esencial en la prevención y resolución de estos crímenes.
"Colombia es uno de los estados con mayor capacidad para atender estas situaciones", asegura Murillo.
Por lo tanto, confiar en las instituciones de seguridad es fundamental para enfrentar este delito.