Este acto de agresión incluyó la quema, el vandalismo, la falta de respeto hacia la propiedad privada, generando un clima de inseguridad y preocupación en la comunidad local y en los sectores agropecuarios. Lea en CONtexto ganadero: El conflicto de tierras en el Cesar: Entre la promesa del Gobierno y la realidad de las invasiones)
El municipio de Chimichagua se vio sacudido por este incidente que puso en riesgo no solo la integridad de la propiedad privada, sino también la seguridad de los trabajadores y residentes del área afectada. Los invasores, sin medir palabra, irrumpieron en el predio con intenciones claras de causar daño y tomar posición ilegal de la tierra.
La situación se tornó rápidamente crítica cuando los invasores comenzaron a prender fuego a algunas áreas del predio, destruyendo zonas esenciales para la actividad productivos. Además, los actos de vandalismo se extendieron a la destrucción de cercas y cultivos, generando pérdidas significativas para los propietarios y trabajadores del lugar.
Ante la gravedad de la situación, la intervención oportuna de los Frentes Solidarios de Seguridad y Paz, en coordinación con las autoridades de Policías y Carabineros, fue fundamental para restaurar el orden y desalojar a los invasores. Gracias a su rápida y eficaz respuesta, se logró minimizar los datos y restablecer la seguridad en el área afectada.
La operación de desalojo fue llevada a cabo de manera coordinada y con un alto grado de profesionalismo, asegurando que los invasores fueran retirados sin mayores incidentes violentos.
Esta acción conjunta entre los Frentes Solidarios de Seguridad y Paz y las autoridades de seguridad destacó la importancia de la colaboración y la preparación ante situaciones de crisis.
Ante estos hechos lamentables, la Federación Colombiana de Ganaderos (Fedegán) emitió un llamado urgente a la acción por parte del Gobierno Nacional, departamental y demás autoridades competentes. Fedegán subrayó la necesidad imperiosa de proteger la propiedad privada y garantizar un entorno seguro para el desarrollo de las actividades agropecuarias.
Para Fedegán, la protección de la propiedad privada es un pilar fundamental para la estabilidad y el progreso del sector agropecuario. El gremio cúpula de los ganaderos ha insistido en que no puede haber excusas ni aplazamientos a la hora de actuar contra aquellos que atentan contra los derechos de los propietarios de tierras y productores. La seguridad jurídica y protección efectiva de las tierras son esenciales para mantener la confianza y la intervención en el campo colombiano.
Finalmente, una vez desalojada la finca, los propietarios agradecieron a Fedegán, sus directivos y a las autoridades que hicieron parte de esta acción de protección de tierras por defender los derechos de los ganaderos y por hacer justicia de forma pacífica.
Para estas familias, esta situación se convirtió en un episodio lamentable y devastador, que no solo generó miedo en quienes trabajan en la finca, sino que también trajo afectaciones a las distintas áreas invadidas. (Lea en CONtexto ganadero: Que la invasión de tierras no lo coja ‘con los pantalones abajo’)