Fragmentar el mecanismo conciliador y articulador de la reforma agraria con un decreto que promueve las movilizaciones campesinas y la ocupación de tierras, es una amenaza para la paz en las regiones y para avanzar hacia una sociedad justa en la que todos los ciudadanos sean protegidos por el Estado.
Así lo plantearon los agremiados a la Unión Nacional de Asociaciones Ganaderas Colombianas -Unaga- que rechazaron este proyecto del gobierno nacional al que consideran innecesario ya que existe la voluntad de negociar terrenos por parte de los actores involucrados.
“La asociación hace un llamado a resaltar que el Sistema Nacional de Reforma Agraria contempla el trabajar de manera articulada en la adquisición y adjudicación de tierras, así como el promover la economía campesina y la agroindustria. Esto significa construir de manera pacífica acuerdos que permitan fortalecer el tejido social en el que todos; población rural y ganaderos hacemos parte. Fragmentar este tejido a partir de confrontaciones no es necesario”, dice un aparte del comunicado emitido por Unaga que reúne a 26 asociaciones productoras de ganado de todo el país.
Rechazo al decreto
Los productores bovinos expresaron su rechazo a la promoción y fomento a las movilizaciones de la población campesina en pro del acceso a las tierras como quiera que incumple con los preceptos del Acuerdo de Tierras firmado con el gobierno nacional.
“Consideramos que no es apropiado promover las movilizaciones de los campesinos sin mecanismos de información transparente y revisión del proyecto en el que se permita identificar el plan de acción y los compromisos desde el Estado y el sector privado. Hacemos un llamado a continuar con la mesa del acuerdo para dicho fin, contribuyendo al desarrollo rural bajo lineamientos de fraternidad”.
A través de su comunicado la Unión Nacional de Asociaciones Ganaderas Colombianas respaldó la postura de la Federación Colombiana de Ganaderos -Fedegán-, al considerar que no es apropiado generar movilizaciones teniendo en cuenta los conflictos previos que se han presentado en diferentes regiones del país. “Problema que pudiese escalar a nivel nacional de seguir con esta iniciativa”.
Necesaria concertación
Añadieron los ganaderos que, precisamente, para evitar conflictos fueron establecidas unas mesas de trabajo en las que las organizaciones representantes de los diferentes gremios han querido participar de manera voluntaria y no cumplir estos mecanismos de diálogo y negociación e incitar a la población a movilizarse y actuar por fuera de los acuerdos establecidos, se constituye en una amenaza para la seguridad en el campo.
“Los debates en torno a la jurisdicción agraria son necesarios para resolver los conflictos de propiedad y tenencia de tierras. Promover actos en contra de los derechos de la propiedad privada atenta contra la democracia y la convivencia ciudadana”, concluyó Unaga.