Toros de armónicas hechuras, fuertes y serios, bien armados, hechos a imagen y semejanza de los que salen al ruedo de los cosos taurinos más relevantes de la geografía española, se verán durante dos días en Cañaveralejo. Las Ventas del Espíritu Santo, la ganadería de Cesar Rincón, amenizará con sus toros de gran casta, este jueves 28 y viernes 29 de diciembre la tradicional feria de Cali en la plaza de Cañaveralejo. El famoso matador colombiano quien salió varias veces en hombros de las grandes plazas de España y del mundo, orgullo del arte del toreo en el país, estará presente dos veces como empresario en el monumental rodeo caleño. Cerca de 17.000 aficionados disfrutarán de la casta de sus toros de lidia durante los dos días considerados los de mayor exposición del arte del toreo. El jueves en la corrida especial que en términos españoles se denomina “Goyesca”, alternarán los matadores españoles José María Manzanares y Cayetano Rivera y el torero colombiano Guillermo Valencia y el viernes, en el gran mano a mano entre el español Enrique Ponce y el peruano Andrés Roca Rey. (Lea: El arte del toreo se viste de luces en Cali) La ganadería de Cesar Rincón es la única empresa ganadera que repite de las seis que participarán en la feria de Cali. Las ventas Las Ventas del Espíritu Santo, nombre que el ex torero Cesar Rincón, le diera a su ganadería en honor a la monumental plaza de Las ventas de Madrid -España, en la que triunfo en 1991 comenzando su carrera, se ubica a 50 kilómetros de Bogotá a 2.600 metros sobre el nivel del mar. Según Rincón -video de youtube- la altura mencionada es a la que mejor se adapta el ganado de lidia. En el municipio de Sasaima – Cundinamarca, alberga en el trópico alto a las reses bravas entre tierras empinadas que los animales suben y bajan con rutinaria frecuencia, lo que les proporciona mayor resistencia. (Lea: La naturaleza de los toros de lidia) El empresario a diario hace lo necesario por conservar el fenotipo de los animales que también lo han hecho famoso en las ferias taurinas nacionales e internacionales. Alimenta a las reses al libre pastoreo con pasto kikuyo y les proporciona otros pastos como suplementos. Además viven entre árboles lo que contribuye a la corpulencia de los animales. Todo es natural en la mencionada unidad productiva. Poco a poco el toro bravo criado en estas tierras ha ido cambiando su fisonomía, el animal culero y bravucón cruzado después con ganado de casta, se ha transformado en los ejemplares actuales. El encaste lo inició en 1993 al traer ganado de dos de las ganaderías de toros bravos más destacadas de España: Jandilla y del Márques de Domecq. De la primera importó 39 vacas y de las segunda 30. Al mismo tiempo trajo cinco machos sementales de las mismas. Cinco años después compró vacas de Torrealta y un semental que se indultó en la Plaza de Toros de Santamaría en Bogotá. También se ha apoyado en la inseminación artificial con toros de Victoriano del Río, otra de las grandes criadoras de toros bravos de España y también del Torreón. (Lea: El secreto de la crianza del toro de lidia) Actualmente en las Ventas del Espíritu Santo, se contemplan toros de armónicas hechuras, fuertes y serios, bien armados, hechos a imagen y semejanza del que sale al ruedo de los cosos taurinos más relevantes de la geografía española.