La palpación rectal ha sido una herramienta esencial en la medicina veterinaria desde hace décadas. Con el tiempo, esta técnica ha ido evolucionando y se ha perfeccionado, permitiendo a los veterinarios obtener información importante de manera rápida y efectiva.

Esta técnica implica la inserción del brazo del veterinario en el recto del animal para evaluar los órganos internos a través de la pared rectal. La palpación rectal requiere habilidad y conocimiento anatómico detallado para evitar causar daño al animal y obtener información precisa.

De acuerdo con Enrique Rimbaud, médico veterinario especialista en sanidad, asegura que “la palpación rectal se utiliza para muchos aspectos en ganadería, no solamente para revisar la preñez de las vacas”. (Lea en CONtexto ganadero: Evite errores en las palpaciones rectales en el ganado bovino)

Para llevar a cabo hay que preparar al animal, es decir sujetado para minimizar el estrés y el movimiento. El veterinario debe colocar su mano en forma de cono, para luego “colocarse guantes de palpar, por higiene y por el cuidado de la salud. Una vez se haga esto, se debe introducir la mano, de a pocos, en el recto y cuando esté dentro se debe abrir la mano”, describe el profesional. En este proceso es opcional usar lubricantes para reducir la fricción y el riesgos de lesiones.

Según Rimbaud, un error que se comete de forma frecuente al momento de hacer palpación rectal a los bovinos es encontrar materia fecal y empezar a sacarla. “Eso no se debe hacer porque cada vez que se saca la materia fecal, entra aire y el recto queda gigante, por lo cual no se pueden identificar estructuras”.

Objetivos de la palpación rectal en bovinos

• Verificación de preñez: Es el aspecto más conocido, ya que la técnica le permite al veterinario determinar el estado de gestación del animal, evaluar el desarrollo del feto y detectar posibles complicaciones tempranas.
• Diagnóstico de trastornos reproductivos: Entre estos trastornos se encuentran los quistes ováricos, endometritis, piómetra, y otras condiciones que pueden afectar la fertilidad y la salud del animal. La detección temprana de estos problemas permite una intervención oportuna, mejorando las tasas de reproducción y reduciendo las pérdidas económicas.
• Evaluación del aparato digestivo: Se puede analizar el sistema digestivo, incluyendo la detección de problemas como la impactación fecal, desplazamiento de abomaso y otras anomalías gastrointestinales; condiciones que pueden afectar la salud del animal.
• Evaluación del aparato urinario: La técnica se utiliza para evaluar los riñones y la vejiga, permitiendo la detección de enfermedades del tracto urinario, como infecciones, cálculos renales y otras anomalías.
• Monitoreo salud general: La palpación rectal ofrece una visión integral de la salud interna del bovino, pues le permite a los veterinarios evaluar el estado de los órganos internos, detectar signos de infecciones, inflamaciones y otras condiciones que podrían no ser evidentes a través de un examen externo.
• Aplicaciones en programas de mejora genética: Esta técnica se utiliza para evaluar la eficiencia reproductiva de los animales y seleccionar aquellos con mejores características genéticas. (Lea en CONtexto ganadero: No olvide esto a la hora de hacer una palpación rectal)