Este sistema de pastoreo se presenta para muchas ganaderías como una estrategia innovadora para intensificar el uso de la tierra en sistemas de producción ganadera. Este modelo no solo contribuye a mejorar la eficiencia del aprovechamiento de los recursos forrajeros, sino que también promueve un manejo más controlado de los animales. (Lea en CONtexto ganadero: Cómo el pastoreo en franjas transformó una pequeña lechería en Colombia)

El Dr. Frederich Díaz Rodríguez (MVZ, PhD), profesor de la Facultad de Medicina Veterinaria y Ciencias Afines de la Corporación Universitaria del Huila (CORHUILA), explica que este sistema se basa en dividir los potreros en pequeñas secciones o franjas mediante el uso de cintas móviles electrificadas, donde los animales tienen acceso limitado a una porción de pasto por un tiempo determinado.

La implementación de este sistema se puede hacer en potreros ya establecidos o que hayan pasado por un proceso de renovación. En la experiencia del profesor Díaz Rodríguez trabajando en la Granja Experimental de la CORHUILA, menciona como algunos potreros renovados en noviembre del año pasado con el pasto Urochloa ruziziensis están en proceso de adaptación para el modelo. Este proceso es esencial para garantizar una oferta forrajera suficiente y de calidad.

Antes de delimitar las franjas, es fundamental medir la disponibilidad de pasto haciendo aforos. Los aforos son realizados por el equipo de trabajo de la Granja Experimental con el uso de un marco de 0.25 m2 (50 cm de largo x 50 cm de ancho) que posee una base de 15 cm de altura para evitar el corte a ras del suelo.

Según el profesor Díaz Rodríguez, esto es muy importante ya que, al respetar esta parte de las plantas, se garantiza la reserva de azúcares necesarios para proporcionar la energía requerida por el pasto para rebrotar en un periodo de tiempo de 20 a 25 días durante la estación lluviosa.

Al momento de hacer el aforo se realiza un reconocimiento visual para detectar en el área a ser pastoreada el estrato bajo, medio y alto del pasto que se ha acumulado. Por cada franja son tomadas tres muestras (una por cada estrato), obteniendo el peso medio de forraje verde (FV) acumulado en 0.25 m2; con este valor y a través de una regla de tres se consigue calcular la cantidad de FV en la franja que será pastoreada.

Sin embargo, para hacer una estimación más precisa de este valor se estima y descuenta el porcentaje del área de la franja que no está establecido en pasto y el porcentaje de pérdidas de FV por pisoteo y contaminación con heces y orina.

El profesor Díaz Rodríguez expone que una vez determinada la oferta de FV es necesario estimar el consumo de los animales en FV o en materia seca (MS). En esta unidad de producción e investigación se asume que los animales en potrero consumen el 2.5% de su peso vivo (PV) en MS o el 12% de su PV en FV.

En ese orden de ideas, parte de los nutrientes en esta unidad son ofrecidos también con suplementación de concentrado (alimento balanceado) después de realizar el ordeño mecanizado. Así, es posible determinar cuánta área a asignar según el número de animales y sus necesidades nutricionales.

Actualmente para la implementación del modelo se está usando un total de 11 vacas en producción de la raza Girolando, cuya producción por animal se encuentra entre los 7 – 15 litros diarios de leche.

Para esta cantidad de vacas se vienen disponiendo franjas de aproximadamente 100 m x 10 m (1000 m2), los cuales son pastoreados en un día de manera controlada, es decir, cada franja es dividida con cinta electrificada en tres secciones que van siendo liberadas por horarios (la primera de 08:00 am a 11:00 am, la segunda de 11:00 am a 03:00 pm y la última de 03:00 pm a 05:00 pm).

En palabras del profesor Días Rodríguez, con el tiempo se espera disminuir el área de las franjas o aumentar la carga animal, ya que al ser el primer pastoreo, la altura del pasto está pasada de la recomendación según la literatura de 30 – 40 cm para esta especie de pasto, lo que aumenta el porcentaje de pérdidas por derribamiento y pisoteo. (Lea en CONtexto ganadero: ¿En qué consiste el pastoreo en franjas y cómo puede implementarlo? (parte 1))

De acuerdo con este caso, las vacas doble propósito que producen entre 7 y 15 litros diarios pueden aumentar la producción total de la finca entre un 20% y 25% al utilizar el sistema de pastoreo en franjas, generando un impacto positivo en la productividad.

Adicionalmente, al tener los animales concentrados en pequeñas áreas las bostas generadas por estos quedan bien esparcidas en potrero, lo que se convierte en una excelente fuente de nutrientes que puede ser usado por el pasto para garantizar la sostenibilidad de la pradera con el apoyo de fertilización química a base de urea y cloruro de potasio, como señala el experto.

No obstante, es importante que las ganaderías que deseen aplicar estos modelos no usen para el control de ectoparásitos, productos que afecten la supervivencia del escarabajo estercolero. Para garantizar una rápida incorporación de las bostas al suelo se necesita del apoyo de estos insectos.

Finalmente, el profesor Díaz Rodríguez afirma que en una situación donde no estén estos escarabajos se podría generar un problema, ya que las botas se van a acumular y hay que recordar que el ganado no consume pasto que este untado o cerca de materia fecal.