En este caso, hay que saber de forma detallada cómo se presentó este problema en el toro, si tiene origen en una condición genética, una enfermedad o un accidente, pues esto determinará si el animal sigue siendo funcional.

César Augusto Gómez Velásquez, médico veterinario y magíster en Ciencias Veterinarias, explicó que cuando los machos tienen un solo testículo en la cavidad escrotal, pueden ser activos reproductivamente, aptos para servicio o preñez.

“Un solo testículo sirve, porque en el momento de la concepción, el que preña es un único espermatozoide. Sí habría una baja concentración (de esperma), pero sería suficiente para preñar una hembra”, dijo. (Lea: ¿Sabe en qué consiste el criptorquidismo en animales?)

No obstante, el experto aclaró que se debe hacer una distinción entre los ejemplares que solo tienen un órgano por una condición fisiológica como el criptorquidismo, en el cual las gónadas no descienden, o si se trata de una laceración que ocasionó su pérdida.

Esto es importante porque, como lo señaló, enfermedades que provocan criptorquidismo tienen un alto componente genético que podría ser heredable a sus crías y afectar su desarrollo, continuando así una patología que debería eliminarse una vez ha sido detectada.

“Por lo general, cuando a un animal no le desciende un testículo, se trata de descartar el sistema de forma temprana, para que no se reproduzca”, advirtió Gómez. (Lea: Revisión de los genitales del toro, estrategia para una reproducción eficaz)

En cambio, una situación diferente ocurre cuando hay un accidente y el toro pierde el órgano como consecuencia, pues si anteriormente era funcional e incluso era sexualmente activo, esta nueva condición no es impedimento para seguir dentro del sistema.

“También si una patología afectó un testículo, se puede realizar un proceso quirúrgico, la orquiectomía o mal llamada castración, para extirparlo. En ese caso, el otro quedará funcional sin que tenga relación con un problema hereditario”, añadió.

En este caso, la criptorquidia se denomina monorquidia, porque como su nombre lo indica, solamente una gónada sufrió problemas. Gómez ilustró con un caso propio cómo tratar al animal. (Lea: Conozca la importancia de la circunferencia escrotal del toro)

“El año pasado, yo atendí un toro donante de semen que perdió un testículo por una patología en las venas y arterias testiculares. El toro siguió donando semen por un tiempo, pero como la concentración se reduce, ya no es rentable porque salen menos pajillas”, concluyó.