Con el apoyo y liderazgo del gobierno de Suecia y la participación del sector público, el privado, la academia y la sociedad civil de Colombia, se hizo un nuevo análisis y se plantearon soluciones para el sector lácteo.
La embajadora de Suecia en Colombia, Helena Storm, indicó que el desarrollo del sector lácteo es relevante tanto para Colombia como para Suecia y por eso contribuyen al desarrollo sostenible de la cadena en nuestro país.
Explicó que desde diciembre del año pasado se desarrollaron mesas de trabajo para fortalecer la industria láctea en Colombia. Allí participaron representantes del sector público y privado (ganaderos e industriales), al igual que la academia y la sociedad civil para identificar retos y alternativas de soluciones para este sector.
“En Suecia hemos impulsado el modelo de cuatro hélices que es una manera de trabajar de forma conjunta la academia, empresas, gobierno y la sociedad civil pues creemos que la interacción y el trabajo en red de estas partes permiten encontrar soluciones innovadoras a los problemas comunes”, sostuvo la diplomática.
Añadió que “nos alegra que se haya propiciado este dialogo multiactor pensando en proponer ideas para fortalecer aun mas este sector tan importante para Colombia. Sabemos del enorme potencial de crecimiento que tiene la cadena láctea aumentando la productividad, la competitividad, la formalización, la producción ambientalmente sostenible y el consumo”. (Lea en CONtexto ganadero: Plan de choque para mitigar la crisis de la cadena láctea pide Asoleche al gobierno)
Recordó que su gobierno apoya el proyecto de la red lechera de Cauca que se lanzó en agosto del año pasado de la mano de aliados como la FAO, Tetrapack, Alival y Alpina alineados con los esfuerzos nacionales y territoriales. Esta iniciativa busca promover trabajo en equipo durante los próximos tres años para establecer un sistema de ganadería sostenible que no solo evite la deforestación, sino que contribuya a mejorar la restauración ecológica.
El proyecto
Ricardo Torres, experto en políticas públicas del sector rural y coautor del proyecto junto a la exgerente del ICA, Deyanira Barrero, habló de las dos sesiones que se realizaron. La primera se dedicó a identificar la problemática y los desafíos que se presentan a lo largo de la cadena, como el potencial de desarrollo y crecimiento que se tiene.
Entre los temas centrales que se discutieron estuvo la problemática que es muy compleja en una cadena tan amplia porque cada eslabón tiene sus propias dificultades, uno de ellos es la baja productividad que se da tanto en la producción lechera como en el procesamiento que ocurre, principalmente, en las pequeñas y medianas industrias. Esto en comparación con otros países que también producen leche de manera importante.
Por eso el primer gran tema es cómo mejorar la eficiencia, la productividad y los costos, sobre todo, hacerlo de manera sostenible, aplicando buenas prácticas y tecnología sin afectar el medio ambiente.
Otro tema que demandó tiempo fue la situación del consumo. En promedio el nivel de consumo de lácteos en Colombia es bajo en relación con otros países y ese es un cuello de botella grande que afecta a todos los eslabones de la cadena. Si se logra aumentar el consumo eso se revierte en el procesamiento industrial, el acopio y la demanda de leche cruda que producen los ganaderos de todos los tamaños. (Lea en CONtexto ganadero: Trabajar de manera integrada en la cadena láctea marca diferencia)
También se habló sobre la admisibilidad de los derivados lácteos en los mercados externos, principalmente en la Unión Europea ante la aparición de nuevos reglamentos y se debe tener la posibilidad a nivel interno de mejorar desde el eslabón primario, la higienización de la leche, la buena calidad para que tenga mejores posibilidades de comercialización. También lo que se debe hacer a nivel de acopio. En el procesamiento las trazas y problemas de higiene que se deben evitar.
La segunda sesión se centró más en algunas experiencias que sirven para mostrar vías de cómo resolver en la práctica estas problemáticas siendo el de la red lechera del Cauca uno de los más destacados. Una de las recomendaciones que se hizo fue apoyar este tipo de iniciativas que se dan a nivel regional y con base en la realidad que viven día a día.
Igualmente está el Programa de Alimentación Escolar que fue otro ejemplo que se expuso por la posibilidad de incluir más productos lácteos para mejorar la salud de los niños y aumentar el consumo.
La industria
Por su parte, la presidenta de Asoleche, Ana María Gómez, insistió en la interacción y el encadenamiento para mirar transversalmente la cadena. “Es posible integrarse como cadena para proponer soluciones y ahora lo que sigue es implementarlas”, dijo.
Cada uno en su eslabón tiene un gran potencial, pero falta dar una mirada transversal a ver qué es lo que está afectando a la cadena y trabajar unidos en la solución de los problemas. (Lea en CONtexto ganadero: Colombia y Suecia compartirán experiencias de sus cadenas lácteas)
Por ejemplo, está el tema de la informalidad y allí se debe mirar que quienes están en dicha situación no es porque quieren sino porque les toca y ahí lo que se necesita es poder ofrecer condiciones para que se formalicen. De la formalización se desprende la competitividad, normalmente.
También es necesario ser competitivos en mercados internacionales sin olvidar que todavía hay espacio para satisfacer el mercado nacional