La sarna es una afección dermatológica originada por la invasión de ácaros en la piel (acariasis), cuya presencia causa irritación debido a la actividad de los parásitos al alimentarse o desplazarse en la epidermis, así como la respuesta alérgica del cuerpo a los desechos y fluidos que estos insectos producen.
En una investigación realizada por César Fiel, Nicolás Fiel y Pedro Stefan, se explica que el ácaro Psoroptes communis var. bovis es un parásito que vive y completa su ciclo de vida sobre el hospedador en 12-14 días. (Lea en CONtexto ganadero: Las 4 sarnas que atacan al ganado bovino)
“El ácaro sobrevive en los animales de un ciclo a otro. Cuando empieza el tiempo frío y disminuye el fotoperiodo su metabolismo y actividad reproductiva se aceleran, progresando rápidamente el curso clínico de la enfermedad”, describen los profesionales.
Por la condición parasitaria estricta del ácaro, la progresión de sarna en las fincas se debe fundamentalmente al contacto entre animales. En la medida que se intensifica la producción, mayor será la transmisión entre animales.
Existen varios tipos de sarna en los bovinos. El primer tipo de sarna es la sarcóptica que es causada por la especie Sarcoptes scabiei variedad bovis, un ácaro que habita y se alimenta del estrato córneo de la piel del bovino. El segundo tipo es la sarna psocóptica que es ocasionada por un parásito llamado Psoroptes bovis, un parásito que vive en la superficie de la piel, no excava y se alimenta de secreciones líquidas de heridas.
El tercer tipo es la sarna corióptica, que es la más común. Este tipo de sarna es generada por la especie Chorioptes bovis, un parásito que no excava, sino que sobrevive y se alimenta de células desprendidas y otros desechos superficiales del animal. El último tipo es la sarna demodécica que es producida por Demodex bovis, un organismo que habita los folículos pilosos y las glándulas sebáceas en los bovinos.
¿Cómo se trata la sarna?
Desde hace muchos años la sarna se ha tratado con acaricidas eficaces con estrictas regulaciones sanitarias de cada país. Estos productos deben superar una prueba controlada y coordinada los entes de sanidad obligatorios en cada territorio.
Es por esta razón que luego de haber sido confirmado “el diagnóstico de sarna, todos los animales del hato deben ser tratados. En la práctica, a veces suele tratarse solo los bovinos afectados por la parasitosis. Esta técnica aliviará circunstancialmente a los vacunos tratados, pero garantizará la presencia de la infestación parasitaria en los animales hasta el próximo periodo de proliferación”.
Existen algunos tratamientos inyectables para tipos de sarna como la psoróptica en bovinos, pero esos deben ser formulados por profesionales veterinarios que conozcan del caso presentado en cada finca. (Lea en CONtexto ganadero: Cómo se expresa la sarna en los bovinos y qué hacer para prevenirla)