logoHeader
Ganadería, ganadería colombia, noticias ganaderas, noticias ganaderas colombia, CONtexto ganadero, ganadería ambiente, complejo respiratorio y reproductivo bovino, causas complejo respiratorio y reproductivo bovino, consecuencias complejo respiratorio y reproductivo bovino, parainfluenza tipo 3, parainfluenza tipo 3 en bovinos, transmisión parainfluenza tipo 3, Virus Respiratorio Sincitial Bovino, transmisión del virus respiratorio sincitial bovino, prevalencia en Colombia del virus respiratorio sincitial b

Foto: magrama.gob.es

ganaderia-sostenible

¿Sabía que la prevalencia del virus respiratorio sincitial bovino en Colombia es del 83%?

por: - 31 de Diciembre 1969

Esta es una de las enfermedades importantes del sector pecuario es el llamado virus respiratorio sincitial bovino (VRSB) que es producido por un Pneunovirus perteneciente a la familia Paramixoviridae. Los brotes ocurren con frecuencia, alcanzando su punto máximo durante los meses de invierno.

Esta es una de las enfermedades importantes del sector pecuario es el llamado virus respiratorio sincitial bovino (VRSB) que es producido por un Pneunovirus perteneciente a la familia Paramixoviridae. Los brotes ocurren con frecuencia, alcanzando su punto máximo durante los meses de invierno.

Se cree que este BRSV se transmite por rutas directas e indirectas, y posiblemente por aerosol a distancias cortas. Sin embargo, todos los mecanismos de introducción y mantenimiento dentro de los hatos ganaderos no están claros. Hay que resaltar que el periodo de incubación del virus es de 2 a 4 días y los signos de la enfermedad consisten en un aumento de la frecuencia respiratoria, tos, respiración superficial y dificultosa, además de secreciones nasales y oculares. (Lea:Conozca las causas del Complejo Respiratorio Bovino)

Alejandra Arias García, profesional PES salud animal, explica en una charla de Fedegán que “este tiene una prevalencia en Colombia del 83 %, en donde todos los tipos de producción están superiores al 50 %. Para el caso de las de leche se encuentran en un 77 %, los sistemas doble propósito en un 83 %” y los de carne al 97 %”.

Todo esto quiere decir que es una enfermedad que se presenta con bastante frecuencia en las explotaciones ganaderas colombianas. Dicha patología puede presentar síntomas subclínicos, pero que igualmente va a desarrollar algunos procesos respiratorios.

En palabras de Arias García, “para el caso de la prevalencia departamental, casi todos los departamentos tienen una prevalencia de este virus superior al 80 y 90 %. Por ejemplo, en el caso de Córdoba, Boyacá y Santander, se acerca al 100 % y 100 % también para los predios”.

Lo anterior significa que existe una alta probabilidad de contagio dentro de las fincas, llegando a convertirse en un enemigo para los productores ya que suele afectar a una cantidad importante de ganados.

De acuerdo con Arias Garcia, este es muy similar a la parainfluenza tipo 3 porque “tienen características de afectación en los animales muy similares, aún cuando afectan todas las categorías, estos virus tienen como mayor afinidad en terneros desde dos semanas de vida hasta seis meses de edad, donde son registrados los casos más severos enfermedad”.

Cuando esto sucede, el animal funciona como un reservorio y ayuda a la transmisión por contacto directo de las secreciones con los otros bovinos. Hay que tener claro que la velocidad depende del tipo de manejo.

Por lo tanto, “aquellos tipos de producción extensivos de carne y hacinamiento, claramente la probabilidad de diseminación de la enfermedad es bastante alta. Este virus inicia replicándose y afectando el tracto respiratorio superior, pues produce unas alteraciones morfológicas funcionales del sistema mucociliar”, detalla Arias García. (Lea: Virus Respiratorio Sincitial Bovino, enfermedad a la que se debe prestar atención)

De esta manera, este virus se convierte en un agente primario que condiciona la entrada para agentes secundarios como es el caso de las bacterias.

Cuando se tiene un animal infectado, lo ideal es que se haga el aislamiento del mismo. En ese mismo orden de ideas, las personas deben limitar el contacto con los animales enfermos, debido a que la interacción entre bovinos anos y enfermos conllevaría a un traslado involuntario del virus.