Las hembras revelan una tasa de natalidad del 81,1 % y se encuentran vacas de 15 años o más con 12 o más partos. La carne registra un nivel deseable de L-TT e para el gen de leptina y acidos grasos de gran calificación.   “La raza Romosinuana es una raza autóctona Colombiana, que a través del tiempo ha demostrado su adaptabilidad a diferentes ambientes agroecológicos y niveles de manejo en Colombia”.   Así lo destacó Gean Carlos Arroyo Fernández en su trabajo de tesis denominado: Revisión de los aspectos productivos y reproductivos de la raza criolla colombiana Romosinuana, presentado para optar al título de Zootecnista de la Universidad de Sucre. (Lea: Revisión de los aspectos productivos y reproductivos de la raza criolla colombiana Romosinuana)   De acuerdo con el estudio, los bovinos de dicha raza tienen un gran nivel genético, productivo y reproductivo que no son aprovechados en Colombia.   “Se destaca su aceptación en países como Venezuela, Costa Rica, México, Brasil, Estados Unidos entre otros, los cuales han realizado múltiples investigaciones a nivel productivo, reproductivo, genético, mejoramiento y conservación de la raza”, sostiene.   Para Arroyo Fernández, las características de los ejemplares Romosinuano, tamaño mediano, poco pelaje, color y textura de la piel, ojos, pezuñas entre otros, le han permitido a esta raza tener unas manifestaciones fisiológicas y patrones de comportamiento en su entorno ecológico que le han valido para estar adaptado completamente al medio tropical.   “Es resistente a garrapatas y parásitos y adicionalmente tiene capacidad para soportar zonas de inundación (como en el Valle del Sinú), gracias a sus fuertes pezuñas”, agrega.   La investigación resalta igualmente la docilidad de los bovinos. “Es un animal que permite ser manejado fácilmente lo cual evita riesgos de lesiones tanto de este como del operario”.   “Por otra parte cabe destacar su longevidad, pues se encuentran vacas de 15 años o más con 12 o más partos, aspecto que económicamente es interesante por su alto rango de vida productiva (Cervantes, 1957; Hernández, 1976)”. (Lea: ¿Por qué el ganado Romosinuano es precoz?)   Carne de calidad   “La hembra tiene habilidad para criar a los terneros, aspecto importante ya que produce crías sanas y de buen peso. En un régimen de alimentación a base de pasto adecuado entre el nacimiento y el destete (240 días), la ganancia de peso es de 0,633 Kg/día (Ossa 2008)”.   Sobresale también su capacidad de producir carne y su precocidad en condiciones ambientales de relativa escasez. En esta raza se ha podido determinar que es factible incrementar las ganancias de peso hasta en un 100 % en un régimen alimenticio sin suplementación y de un 261 % con suplementación.   Su carne registra buena terneza y marmóreo. “Mediante técnicas de análisis de ADN, Martínez (2006) determinó que en el 30% de los animales Romosinuanos se detectó el marcador deseable L-TT e para el gen de leptina”.   “En cuanto a la proporción de ácidos grasos -que revela la calidad de la carne- el palmítico fue de 17,64, el esteárico (19,92), el oleico (21,15), linoleico (3,66) y linolénico de 2,97. Son valores considerados óptimos”.   Revela la eficiencia reproductiva de las hembras con tasa de natalidad hasta de un 81,1 % (Hernández 1976; 1981) y del macho con semen de alta calidad y abundante prole normal y sana Hernández (1967). (Lea: Romosinuano ha registrado preñez a los 21 meses)   En cuanto al rendimiento en canal diferentes autores afirman que se encuentran entre 50 % y 60 % (Cardona 1960; Abadía 1976; Jiménez y Acosta, 1986).   “Hay que aprovechar estos parámetros reproductivos de la raza Romosinuana en explotaciones ganaderas del país para así mejorar la producción de crías por año”, puntualizó Arroyo Fernández.