Conocer y proteger los órganos sexuales del toro reproductor es una tarea fundamental para realizar una monta o inseminación con la que se garantice la preñez.
Un trabajo realizado por el Sena revela que en una empresa ganadera es elemental identificar cada parte de los órganos sexuales del toro y su funcionamiento.
El informe describe cada una de la partes del aparato reproductor: Glándulas accesorias, vejiga, vaso deferente, pene, testículos, epidídimo, próstata, recto escroto, próstata, recto y músculo retractor. Además de las 23 restantes que conforman el tracto genital.
A eso se suma la relevancia de la realización de exámenes patológicos y las revisiones de los testículos y el recto antes de la monta, así lo manifestó Diego Ortiz, investigador PhD de la Corporación Colombiana de Investigación, Corpoica: "En el proceso con toros reproductores debe haber estrategias importantes para que el animal tenga eficiencia en el proceso de reproducción”.
Con los exámenes se constata o descarta la presencia de enfermedades de transmisión sexual, que pueden pasar del toro a la vaca en el momento del coito. (Lea: 14 enfermedades sin control oficial atacan al ganado en Colombia)
Aparato reproductor de un toro.
Luego del exámen de patologías se sigue con el proceso de observación del animal reproductor. Para eso se pone a caminar al toro y se analiza el movimiento colateral de los testículos.
“Si el macho mueve una extremidad izquierda debe moverse el testículo derecho. Luego se mira el tamaño. El derecho es más grande y está más abajo que el izquierdo pero no se percibe mucha diferencia”, anotó el experto.
El toro es llevado a un sitio seguro donde permanece con un membrete para hacerle una palpación de genitales. La sensación a tocarlos debe ser, describió Ortiz, “como cuando se coge un cojín con agua que al hacer presión se produce un rebote leve”. Esto se hace con cuidado porque la presión en el testículo causa dolor al animal.
Si se detectan asimetrías, deformidades, inflamaciones o lesiones es posible que sea señal de alarma por la presencia de alguna enfermedad de transmisión sexual.
Si no se perciben síntomas de patologías,se hacen las pruebas del líbido sexual al toro con vacas en celo para conocer el número de montas hechas y su efectividad.
El toro necesita descansar luego de haber estado con el grupo de hembras por mínimo 2 meses y recibir una dieta alimenticia balanceada con lo que recuperará su capacidad reproductiva. (Lea: 5 enfermedades que causan abortos en bovinos)
Además no se descarta, agregó el investigador de Corpoica, la palpación rectal del toro para conocer el estado de las glándulas anexas.
Médicos veterinarios, especialistas e internistas son los expertos capacitados en la revisión del aparato reproductor del toro. De esta forma se garantiza la efectividad del proceso de reproducción bovina.