La medida anunciada por el MinAgricultura entró en vigencia el primero de marzo. Entre los productores hay incertidumbre frente al papel de las empresas que compran el líquido, ya que temen que puedan descontar el incremento de las bonificaciones. Luego de 2 años sin aumento, los productores de leche recibirán un 8.3 % adicional por su materia prima. El anuncio no ha caído bien entre los ganaderos, ya que consideran que no es suficiente para amortizar el alza de diversos insumos indispensables para su actividad como son los agroquímicos, fertilizantes y concentrados. (Lea: Aumento del precio de la leche no cayó bien en cuencas principales) Adicionalmente, entre los empresarios dedicados a la lechería, hay un factor que no los deja estar totalmente tranquilos: la industria. Este diario consultó con 3 personas ligadas al sector lácteo y dejaron ver su zozobra frente al actuar de las empresas que compran la leche y la posibilidad de que no respeten el incremento. Mariano Restrepo Flórez, presidente de la Asociación Regional de Ganaderos del Norte, Asoganorte, Antioquia, aseguró que la medida tomada por el Ministerio de Agricultura fue tardía, ya que en el departamento, las empresas vienen pagando entre un 15 y un 20 % más desde los últimos meses de 2015. Escuche las declaraciones de Mariano Restrepo Flórez
“Teníamos el litro de leche a finales del año anterior a $850 y $870, pero hoy valen $1.000 sin que haya un cambio drástico en su calidad composicional. Esa es nuestra industria”, indicó. (Lea: Ganaderos califican como ‘irrisoria’ alza en el precio de leche) Para el dirigente, la leche tiene comportamientos similares al de otros negocios en donde se rige la ley de la oferta y la demanda, por lo que en el momento actual ante la escasez del producto, hay tendencia al alza. Sin embargo, aseveró que si el precio del dólar no fuera de $3.200 como ocurre en la actualidad y estuviera en $1.800 como estaba hace varios meses atrás, seguramente Colombia estaría inundada de leche en polvo. “Como no era atractivo para los industriales traer la leche de afuera, es más fácil comprarla acá así sea a $1.000 el litro. No obstante, cuando nos volvamos a recuperar, aunque dudo que sea pronto, obviamente el producto volverá a los precios históricos de $850. La industria buscará cómo esquivar ese 8.3 % de incremento”, criticó Restrepo Flórez. En ese mismo sentido se pronunció hace unos días, Juan Diego Martínez*, productor nariñense, quien aseveró que el aumento anunciado será muy provechoso para aquellos que tienen sistema de enfriamiento en sus predios. No obstante, puso en entredicho el papel de la industria a la hora de reconocer el incremento. (Lea: 6 ajustes que los ganaderos esperan que cumpla la industria láctea) “Falta ver si la industria no se inventa algo para no pagar el incremento y descontarlo por cualquier motivo. No solo son los costos de producción, es que las empresas se inventan cosas. Cualquier parámetro lo cambian y uno queda jodido”, criticó. José de Silvestri, director ejecutivo de la Asociación de Ganaderos de la Costa Norte, Asoganorte, corroboró lo dicho por Mariano Restrepo Flórez y aseguró que en muchas zonas del país las industrias vienen pagando más por el litro de leche, debido a la escasez que hay del producto, especialmente en regiones del Caribe. “Apenas tengamos lluvias y se reestablezca la producción, baja el precio y quitan bonificaciones (...) ¿Qué podría pasar?, a través de las bonificaciones nos castigan, no nos pagan unos pesos más, sino que nos quitan plata. Esa es la preocupación de muchos ganaderos porque no hay laboratorios de referencia, ya que los únicos que tenemos son los de las empresas que dan los resultados de la calidad del producto”, amplió. (Lea: Precio base que se paga al productor de leche sube en 8.3 %) Para el dirigente del Atlántico, el alza no equipara los gastos que implica producir la leche, debido a que el lácteo ha perdido casi el 15 % del valor en los últimos años, por lo que el 8,3 % de incremento no compensa en pesos reales las pérdidas que ha tenido obtener la materia prima.