Enrique Rimbaud, experto en sanidad animal, expone que, hay tiempos adecuados para consolidar la sanidad de los animales en campo y, además, se necesita de un constante apoyo de un profesional, en este caso, de un médico veterinario. Por lograr este objetivo, se tienen unos pasos que son explicados por el profesional.

1. Diagnóstico: Este aspecto conlleva a que se hagan unos gastos en “toma de muestras para ver cómo estamos con los parásitos gastrointestinales, toma de sangre para analizar los hemoparásitos, revisión de los animales, palparlos y un montón de aspectos. Teniendo este diagnóstico se pasa al siguiente paso”, dice Rimbaud.

2. Desparasitación: Cuando se habla de esta acción se refiere a eliminar los parásitos que tienen los bovinos y no a mezclarlo con otras como el suministro de vitaminas.

De acuerdo con el experto, “los parásitos gastrointestinales inflaman el abomaso y el intestino delgado, y en el abomaso es donde absorben las vitaminas, por lo que sí está inflamado y se brinda un desparasitante con vitaminas, este va a actuar, pero las vitaminas las va a expulsar. Entonces se está malgastando dinero”. (Lea en CONtexto ganadero: Cómo escoger el desparasitante adecuado para bovinos )

Se debe brindar desparasitante que esté adecuado a la cantidad de parásitos que se tiene en el momento del diagnóstico.

3. Aplicar vitaminas: El experto dice que, si se quiere brindar vitaminas, el productor debe esperar una semana después de la desparasitación para que se desinflame el abomaso y el intestino delgado, y así sean absorbidas adecuadamente.

“La vitamina que precisa el ganado es la AD3E porque esta no viene sola”, afirma Rimbaud. En esta aplicación es importante tener en cuenta la etapa en la que se encuentra el animal, para así suministrar la dosis correcta.

Según el profesional, “esto queda almacenado en el hígado por seis meses, quiere decir que aquellos que aquellos que los dan cada mes o cada tres meses están tirando el dinero”. (Lea en CONtexto ganadero: ABC para aprender a dar vitaminas al ganado )

4. Vacunar: “No puedo vacunar al mismo tiempo que desparasito ni vacunar al mismo tiempo que doy las vitaminas porque la vacuna genera anticuerpos, que son proteínas que vienen de los aminoácidos. Estos últimos son formados por el hígado con las vitaminas precursoras”, describe Rimbaud.

Por esta razón, una vez realizados todos estos, es mucho más fácil para el ganadero tener en cuenta este orden, para que de tal forma se lleve a cabo una correcta sanidad animal del hato.

Finalmente, un punto que resalta el productor es que “todas las desparasitaciones, aplicación de vitaminas y vacunaciones se deben hacer con una aguja diferente por cada animal porque en el caso hipotético que los animales tienen hemoparásitos, si se utiliza la misma aguja se transmitirá la enfermedad de un animal a otro y será más caro la prevención que la curación”.