Sambuceti y otros explicaron en el libro “Crianza artificial de terneros. Guía de buenas prácticas para operarios lecheros” que el banco de calostro requiere una logística que puede hacer difícil su aplicación. (Lea: Conozca las 5 Q del manejo de calostro)
Aun así, anotaron que “siempre es recomendable tener calostro de calidad guardado como reserva para casos de necesidad puntual”, por lo que ofrecieron algunas recomendaciones a la hora de trabajar con uno de estos bancos:
- El calostro que se va a congelar será siempre proveniente de vacas sanas de más de un parto y de buena calidad (medido con calostrómetro o refractómetro).
- Este líquido se almacenará con la fecha de extracción y la calidad anotada en el recipiente.
- Como recipiente pueden utilizarse botellas plásticas aplastadas (para facilitar el descongelado), limpias y desinfectadas. También pueden utilizarse bolsas plásticas, o recipientes comerciales.
- No se recomienda hacer mezclas de calostro de distintas vacas.
- Para el descongelado, debe tenerse la precaución de hacerlo a baño maría, y que la temperatura del agua no sea superior a 45 °C (medido con termómetro).
- Una vez descongelado, debe ser suministrado de inmediato al ternero para evitar la multiplicación de bacterias en el calostro.
Por su parte, el Instituto Nacional de Investigación Agropecuaria de Uruguay (INIA) detalló las distintas opciones para conservar el calostro y qué tener en cuenta en cada una de ellas. (Lea: Bancos de calostro, alternativa para tener crías bien alimentadas)
Entre las opciones expuestas, el calostro se puede almacenar en refrigeración, en refrigeración con conservante o congelación. En los tres casos recomiendan colectarlo en las primeras dos horas tras el parto, evaluarlo y guardarlo en recipientes separados según la vaca.
En las dos primeras aconsejan conservarlo en envases plásticos limpios y desinfectados. El conservante que se utiliza es 10 ml de solución de sorbato de potasio al 50 % por cada litro. Para la congelación, también se pueden usar bolsas que facilitan el almacenaje.
No hay que olvidar que se debe rotular con fecha y calidad en los tres casos, prestando atención que en el proceso de congelar no se vayan a borrar estos datos. La idea es enfriar o congelar dentro de la primera de colectado. (Lea: ¿Sabe cuándo se debe suministrar el primer calostro?)
A la hora de suministrarlo, la entidad indica que se debe calentar a 60ºC en cualquiera de los tres casos, pero tenga en cuenta que en el descongelamiento toma más tiempo. Aunque difiere de la estipulada más arriba, se habla que la temperatura ideal del calostro debe ser 39 ºC.
La principal diferencia entre los tres es que el refrigerado se puede consumir dentro de las 48 horas después de guardarlo, el refrigerado con conservante hasta cuatro días, y el congelado puede almacenarse por un año.