De acuerdo con Andrés Felipe Salazar León, gerente técnico de Phibro Animal Health Colombia SAS, los ganaderos en Colombia solamente tienen la concepción del síndrome de vaca caída, esto es, la hipocalcemia clínica, mientras que la hipocalcemia subclínica recibe menor atención.
El experto sostuvo que los casos de hipocalcemia clínica oscilan entre 5 y 7 %, como lo ha concluido tanto la literatura internacional como nacional. Añadió que la susceptibilidad a este trastorno metabólico se incrementa de manera proporcional con el aumento de los partos.
“(Por el contrario), la hipocalcemia subclínica no la percibimos directamente porque no la tenemos correlacionada. Pero los estudios demuestran que el 50 % de las vacas que dan cría tienen esta enfermedad”, dijo Salazar. (Lea: ¿Sabe usted qué es un suplemento mineral aniónico?)
El gerente técnico de Phibro precisó que la hipocalcemia tiene 3 fases: 2 subclínicas y 1 clínica. En las primeras 2 fases, la vaca no cae. Sin embargo, debido a que tiene unos bajos niveles de calcio, su sistema inmune se deprime más de lo normal y son más susceptibles.
Así pues, las vacas con la patología subclínica pueden llegar a desarrollar problemas como metritis o retención de placenta, o se demoran para retornar al estro, dejando de ser productivas. Esto también se debe a que disminuyen el consumo de materia seca (MS).
“Estos animales se van a demorar más a llegar a su pico de producción porque se demoran en salir del Balance Energético Negativo (BEN). Esto ocurre en 50 % de las vacas que paren, el problema es que no es visible”, sostuvo. (Lea: 5 recomendaciones para prevenir y tratar la hipocalcemia)
Por este motivo, desde Phibro Animal Health Colombia SAS se están llevando a cabo trabajos en distintos hatos lecheros, realizando serologías hasta 48 horas después del parto para medir niveles de calcio en la sangre y determinar las medidas más adecuadas para recuperar la normalidad.
“Los niveles óptimos de calcio en una vaca parida deben ser arriba de 8,5 mg/decilitro. En cambio, una vaca caída tiene niveles por debajo de 5 mg. En investigaciones hemos encontrado la misma correlación del 50 % de las vacas con niveles de calcio en sangre entre 5 y 8,5 mg, que es una hipocalcemia subclínica”, agregó.
El estudio “Indicadores metabólicos en razas lecheras especializadas en condiciones tropicales en Colombia” elaborado en 2007 encontró que la raza Holstein podría ser la más susceptible a este trastorno. (Lea: ¿Cómo funcionan los aminoácidos en la suplementación de los rumiantes?)
Esto podría atribuirse a la mayor producción de leche, que ocasiona una reducción en los niveles de calcio y fósforo en la sangre. Para conocer con mayor profundidad y evitar la presencia de este trastorno, los hatos lecheros en Colombia deben establecer un plan de muestreo estratégico para evaluar las vacas de forma periódica.