El meteorismo o timpanismo es una condición que se observa en rumiantes, caracterizada por una anormal distensión del rumen, debido a la acumulación de gas. Se divide en dos: gaseoso y espumoso, este último forma una espuma pegajosa llamada empaste.

El meteorismo es una de las principales alteraciones de la salud que perjudican la productividad en bovinos para carne y leche en varias regiones como el oeste de América del Norte, el este de Australia, Nueva Zelandia y gran parte de la zona sur de Latinoamérica.

Es un trastorno digestivo que consiste en la formación de pequeñas burbujas de espuma que retienen los gases producidos durante la fermentación ruminal, impidiendo su eliminación por eructos. (Lea: Los beneficios de la cascarilla de soya en la alimentación del ganado)

Muchos factores han sido involucrados como causales sin conocerse a ciencia cierta su influencia en el desarrollo de este trastorno. Actualmente no está claro el origen etiológico del meteorismo espumoso, por lo cual no hay una medida segura para su control.

Así lo explicó Gustavo Bretschneider del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) en Argentina, quien agregó que el meteorismo espumoso (ME) ocasiona alteraciones circulatorias y respiratorias que pueden producir la muerte del animal. 

Además de las pérdidas asociadas a la mortandad, existen pérdidas subclínicas que se manifiestan en la disminución de la producción de carne y leche en animales afectados por un grado moderado de ME. (Lea: Los remedios caseros para aliviar el timpanismo)

Según la Dra. Deborah Cesar, el trastorno digestivo se presenta debido a una alteración entre los agentes productores de espuma o espumógenos y los que la destruyen (espumolíticos), que mantienen la espuma en valores aceptables. Las probables causas dependen de la planta, el animal o el medio ambiente.

Factores relacionados con la planta

El ME está relacionado en primer lugar con praderas artificiales y la presencia de especies meteorígenas (productoras de meteorismo). El factor desencadenante es el consumo, por parte de los animales de praderas con más de 50% de su composición total formada por leguminosas.

Las leguminosas más peligrosas son alfalfa, trébol blanco y trébol rojo, aunque es su estado de desarrollo el que determina la aparición de problemas, pues cuando están en etapa de rápido crecimiento y aún son tiernas, es cuando se pueden producir los casos de meteorismo.

Factores que involucran al animal

Hay animales más susceptibles a otros al ME dependiendo de ciertas características. Por ejemplo, las razas cebuinas son más resistentes que las europeas, siendo la más susceptible la raza jersey. La edad es otro factor de riesgo: los adultos también tienen mayor riesgo que los jóvenes.

Un tercer indicio es la producción, pues novillos con mayor ritmo de engorde y vacas lecheras de alta producción son los más propensos a desarrollar la enfermedad, debido a sus altos niveles de consumo. (Lea: Conozca las propiedades de la zeolita y su uso en ganaderías)

La saliva es un aspecto que ha sido investigado con mayor atención, pues tiene tanto factores productores de espuma como factores que la disminuyen. Alteraciones en la población microbiana ruminal y el pH del rumen (se hace más ácido) pueden causar ME.

Factores relacionados al medio ambiente

La influencia del clima sobre la aparición de esta patología estaría relacionada a su efeto sobre el crecimiento y composición de los vegetales. Por ejemplo, noches frías con bajas temperaturas predisponen a altos niveles de azúcares y proteínas solubles, ambos factores de meteorismo.

De igual modo, los bajos niveles de nitrógeno disponible en suelos limitan la disponibilidad de fósforo a los vegetales, por lo cual la dominancia de las leguminosas se da en los primeros años de desarrollo de las praderas. Es por ello que los problemas graves de meteorismo se presentan principalmente en las praderas nuevas.