Al comprar una finca y aspirar a ser ganadero, es esencial realizar una serie de pasos porque la ganadería por pasión “no reembolsa el dinero”. Los ganaderos deben buscar una relación costo – beneficio, que sea provechosa, asegura el médico veterinario Enrique Rimbaud, quien agrega que no se puede tener a esta actividad económica como un hobby.

Para el experto, antes de sumergirse por completo en la crianza de ganado, el primer paso es conocer a fondo las condiciones de la finca adquirida. Esto implica evaluar la topografía del terreno, la calidad del suelo, la disponibilidad de pasto y agua, así como cualquier infraestructura existente en el predio, como cercas, corrales y establos. (Lea en CONtexto ganadero: Siga estas 7 reglas de oro al momento de comprar una finca)

De acuerdo a Rimbaud, “hay que empezar con gastos que no son tan caros pero son necesarios, como el análisis de suelo para ver los minerales y los componentes del suelo. De igual forma, hay que analizar la acidez del suelo y la calidad de agua”.

El profesional asegura que una vez se realice este primer acercamiento, la recomendación es buscar asesoría de un ingeniero agrónomo, quien puede encargarse de hacer un estudio de los bosques, los potreros productos e improductivos, los que tienen piedras, los pastos naturales que se tienen, entre otros aspectos. Es decir, “esto podría ser un primer inventario para ver qué es lo que se tiene”, señala el experto.

Una vez se haga esta revisión, es importante tener una visión clara de los objetivos como ganadero, que es el segundo paso. ¿Está interesado en la producción de carne, leche u otro producto ganadero específico? Basándose en las metas y las características de la finca, el productor decide qué tipo de ganado es más adecuado para sus necesidades y condiciones locales.

Para tomar esta decisión, es indispensable investigar sobre las razas de ganado más adecuadas para la región donde se encuentra el predio, así como el propósito que se tenga. (Lea en CONtexto ganadero: Lo que no debe hacer cuando quiera comprar una finca ganadera)

Además, Rimbaud dice que hay que tener en cuenta los pastos que tiene la finca, pues “es importante tener claro si estos son suficientes para producir carne o leche. También se debe calcular cuál es la carga ganadera que se puede tener”.

Cuando se haya definido el tipo de ganado que se criará, el productor debe desarrollar un plan de manejo, que es el tercer paso. Esto incluye aspectos como la alimentación del ganado, el control de parásitos, la reproducción y el manejo de residuos.

Tener un plan bien estructurado le ayudará a mantener la salud y bienestar de su ganado, así como a maximizar la productividad de la finca.

El cuarto paso se deriva del análisis que hizo en el primero, pues para criar ganado de manera efectiva se necesita una infraestructura básica. Esto puede incluir corrales adecuados, bebederos, áreas de descanso, comederos, instalaciones para el ganadero del ganado y sistemas de cercados adecuados, etc.

Por esta razón, el productor debe asegurarse que estas estructuras estén en buen estado y que sean funciones antes de introducir el ganado en la finca.

Finalmente, el quinto paso es invertir en capacitación y asesoramiento, pues como nuevo ganadero, es fundamental invertir en el desarrollo profesional y conocimientos técnicos. El productor debe buscar oportunidades de capacitación, ya sea a través de programas de extensión agrícola, cursos en líneas, talleres locales o asistencia de profesionales del sector.

Todo esto, teniendo en cuenta que obtener conocimientos sólidos le ayudará al productor a tomar decisiones informadas y enfrentar los desafíos que pueden surgir en el camino. “La idea es que estas capacitaciones se hagan con profesionales para así obtener retroalimentación y conocer cómo ha sido el proceso del ganadero”, concluye Rimbaud.