En ganadería bovina una hembra eficiente y productiva es aquella que es capaz de parir un ternero al año, pero eso no depende solo del animal ya que los cuidados en todas las etapas del desarrollo corporal son indispensables para conseguir este objetivo. Conozca más detalles.
Si se quiere preñar rápidamente las vacas del hato, existen dos aspectos de gran importancia que están relacionadas con la adecuada nutrición y bienestar animal, tal como se explica en un video de La Finca de Hoy. (Lea: Colombia está frente a una oportunidad grande con la cría)
En este video, Germán Ruiz expone que “la vaca debe parir en una excelente condición corporal, o sea engrasada, gorda. Esto para que le de muy buena leche a su cría, para que no pierda tanto peso, pues normalmente en el parto entra en una condición que se llama balance energético negativo”.
Al no perder tanta condición corporal, la vaca va a ciclar más rápido, teniendo en cuenta que el manejo alimenticio debe ser óptimo durante la gestación en preparto y posparto, por lo que se le debe proporcionar forrajes de buena calidad y suplementación adecuada.
De acuerdo con Ruiz se le debe suministra, “una sal mineralizada de excelente calidad, calcio, fósforo, y elementos menores para que ella cicle y entre en celo, teniendo en cuenta que esto lo pueden hacer 60 días después del parto. La idea es que tengan la oportunidad de estar en celo entre 60 y 100 días después del parto, más 285 días que dura la gestación, entonces se tiene un becerro cada 240 – 280 días, que es lo que más se aproxima a tener un parto por vaca al año”.
A esto hay que sumarle que hay que practicar revisiones sanitarias y diagnósticos reproductivos periódicamente para determinar el estado de salud de las hembras y descartar a las vacas improductivas.
El segundo de los aspectos está relacionado con el bienestar animal, pues “no solo es la nutrición, pues es muy importante el bienestar animal como que el animal tenga sombrío porque necesita la sombra, agua de buena calidad y que esté cerca para que no tengan que recorrer grandes distancias para conseguirla”, menciona Ruiz.
Este bienestar animal es indispensable, pues una vaca tranquila, sana y dócil vivirá muchos más años, ofrecerá mayor productividad y partos saludables.
Según Ruiz, “la longevidad de las vacas depende mucho de qué calidad de vida. Yo tengo animales de 10 y 14 años y han estado muy bien”.
Por su parte, en un video de Youtube de Antonio del Dago-Hacienda La Veronica dice que las ganaderías deben ser manejadas como un negocio, por lo que como tal se debe buscar que los ingresos sean cada vez mayores teniendo la capacidad de ser muy productivos.
“Si una vaca no se logra preñar tras varios intentos y su producción es poca o ninguna, esta vaca estará generando una serie de gastos y tiempo para alimentarla y mantenerla, por lo que es mejor descartarla y no perder más tiempo y dinero. Si la enviamos al matadero, terminaremos por ganar dinero con esta venta, mucho más de lo que haríamos teniéndola en el hato esperando el milagro”, menciona Dago.
Para el experto, hay que tener en cuenta que una vaca preñada al año dará una cría en el mismo periodo de tiempo, y lo que significa que son más utilidades para el productor. “El tipo de venta de esas crías debe ser evaluado de acuerdo a las posibilidades de mercado que tengamos”, comenta Dago. (Lea: La cría, un negocio rentable y con resultados a corto plazo)