Ricardo Arenas, médico veterinario y conocido en internet como el Profesional Amigo, señala que existen varios aspectos que el ganadero fortalecer en estas fiestas decembrinas para no ver afectado su negocio. Entre estos puntos están los efectos de la pólvora, el manejo de los animales, el cuidado a animales y maquinarias, entre otros.

Arenas puntualiza que usar pólvora cerca de los animales como los bovinos puede traer efectos negativos para su bienestar ya que al ser ruidos fuertes que vienen acompañados de destellos de luz y vibraciones, los bovinos pueden estresarse, asustarse y mostrar comportamientos de agitación.

Esto quiere decir que, con el uso de la pólvora, se atenta contra “los cinco fundamentos del bienestar. Uno de estos es estar libre de estrés y miedo por ruido y sofocación”, expone Arenas.

La implementación de estos productos genera que, no solo se estresen los bovinos, sino que se bajen los niveles en las producciones de leche y si es de carne que se tengan menos gramos ganados por día.

Además, de acuerdo a Arenas, con el uso de la pólvora “existe la posibilidad que se tengan incendios forestales, que claramente perjudican, no solo el ambiente en general, sino particularmente las fincas ganaderas que puedan tener problema de desabastecimiento de comida por incendios, situación que se complica con el fenómeno del niño”. (Lea en CONtexto ganadero: Pólvora y ganadería: entre la tradición y el cuidado animal)

En este orden de ideas, las festividades deben traer consigo un manejo integral por parte de los productores y sus colaboradores en las fincas, ya que de esto depende que los números no vayan a disminuir.

En palabras de Arenas, “en estos días es importante que el ganadero tenga en cuenta que el trabajo que se realice debe ir acorde a las rutinas porque el ganado no tiene fiestas y no están pendientes de eso. Por ejemplo, el 25 el ordeño debe realizarse a la misma hora y con los mismos cuidados de todos los días”.

Esto lo menciona el experto ya que muchas veces, especialmente en estos días festivos, los empleados ralentizan los procesos y trabajan de forma menos constante. Es por esta razón que los animales pierden sus rutinas, se estresan y se generan menores niveles en la productividad.

En palabras de Arenas, “hay que cuadrar los turnos con empleados responsables que hagan esas labores igual de bien hechas que cualquier otro día y a la hora que corresponden porque el horario y la calidad del ordeño cuando se deteriora por las fiestas, afecta a los animales porque se estresan y se comienzan a tener muchos más problemas de mastitis”.

Esto quiere decir que el mal manejo no solo genera consecuencias en los bovinos, sino también en la calidad de la leche que producen, lo cual repercuta directamente en el negocio del ganadero.

Finalmente, Arenas dice que con el mal manejo “se dificulta la calidad de la leche tanto por el ordeño mismo como por otras condiciones y tenemos pérdidas de leches y otra cantidad de problemas. Por eso hay que recordarle al productor que en estos días las labores deben hacerse de la misma manera, con el mismo cuidado, calidad y horarios que en cualquier otro día”. (Lea en CONtexto ganadero: Tenga en cuenta la importancia de los horarios para alimentar al ganado)