Fabia Viviana Fernández, doctora en medicina y tecnología veterinaria dice que cuando ocurre una presentación anormal del ternero durante el parto hay que decidir si “debemos o no ayudar y cuándo es el mejor momento de hacerlo. Para tomar esta decisión debemos basarnos fundamentalmente en experiencias anteriores”.

La experta dice que si se ve que la vaca realiza esfuerzos y el parto no ocurre, se puede llevar a cabo una inspección vaginal para evaluar con mayor certeza cuáles son los pasos a seguir. Todo esto, teniendo en cuenta que hay posturas que, si bien no son correctas, son fáciles de corregir, mientras que, en otros casos, la única opción es realizar una cesárea. (Lea en CONtexto ganadero: ¿Cuándo es necesaria la cesárea en vacas y qué métodos existen?)

“Antes de realizar la inspección debemos lavarnos bien las manos y desinfectarlas para no introducir contaminantes al útero provocando una infección, así como también atar previamente la cola de la vaca”, explica Fernández.

Además, hay signos que dicen que la vida de ese ternero está en riesgo y que se debe actuar inmediatamente. Un ejemplo de esto es el color de las mucosas y la lengua, que pueden estar evidenciando algún grado de asfixia.

De acuerdo con la profesional, “eso es lo que vuelve tan difícil la decisión al momento de asistir el parto, pues no debemos apurarnos, pero si no queremos que corra riesgo la vida del ternero ni el futuro reproductivo de la vaca, tampoco debemos demorarnos en la asistencia”.

Para asistir el parto, lo primero que hay que hacer es corregir la posición de la cría, de tal manera que pueda atravesar el canal de parto sin riesgos para él o para su madre.

Según Fernández, “una vez está colocado en la posición correcta, realizaremos una tracción alternada de las manos, atándolas previamente. En algunos casos una rotación del ternero facilita la salida ya que los diámetros desencontrados de las caderas de la vaca y el ternero optimizan su esfuerzo expulsivo”.

Otro factor que se debe tener presente es realizar la fuerza de tracción simultáneamente con las contracciones de la vaca.

Datos clave

• La experta dice que es fundamental “reservar un potrero para pariciones que sea de fácil acceso, con agua y sombra a disposición”.
• Hay que ser paciente en el proceso de parto, por lo que se debe estar preparado para dar asistencia correcta si es necesario.
• Si se asiste el parto, hay que utilizar las medidas de higiene adecuadas para no provocar una infección.
• “Provea buenos cuidados al recién nacido como limpiado de mocos y las vías áreas, estimulando la respiración, secándolo, monitoreando las demoras en pararse y mamar. Desinfecte con yodo el ombligo siempre que sea posible, ya que es vía de entrada para infecciones que originan problemas articulares”, dice Fernández. (Lea en CONtexto ganadero: 5 maniobras obstétricas que se usan en partos distócicos en vacas)