Los primeros auxilios son tratamientos inmediatos que se prestan para preservar la vida del animal, evitar su sufrimiento y evitar que su condición se deteriore.
Sin embargo, es importante tener en cuenta que se trata de un apoyo momentáneo mientras que llega el veterinario ya que no siempre está en la finca.
Según la cartilla de Salud Animal en ganadería bovina, elaborado por Fedegán-FNG, “para poder prestar los primeros auxilios, es necesario saber distinguir entre un animal enfermo y uno sano o en buenas condiciones”.
En el capítulo correspondiente a primeros auxilios en veterinaria, la Coordinadora de Área Salud y Bienestar Animal Fedegán – FNG, Esperanza Polanía Pardo; la Profesional en Salud y Bienestar animal Fedegán – FNG, Olga Lucía Franco Lizarazo; y los profesionales de salud animal de las 14 Unidades Regionales de Desarrollo Ganadero Fedegán – FNG, describen algunas características que permiten detectar las alteraciones en el animal teniendo en cuenta el estado de salud. (Lea: Qué hacer cuando se presenta asfixia en los bovinos)
Un bovino enfermo se caracteriza por falta de apetito, temperatura fuera de los rangos normales, no presta atención a su entorno, se mantiene separado de los demás de su grupo, no quiere moverse o en caso contrario se muestra muy inquieto; la marcha irregular se puede deber a un dolor de las pezuñas o de las patas. Al aproximarse a un animal tumbado éste no se pone de pie.
Además, mira con insistencia a sus flancos o cocea su vientre; hocico seco en los bovinos y búfalos; heces demasiado blandas o duras, dificultad para defecar; cambio brusco en la cantidad de leche producida; presencia de sangre o de otra sustancia extraña en la leche.
Cuando se presenta uno o varios de estos síntomas el ganadero, el administrador o el trabajador de la finca puede ayudar al animal a aliviar su sufrimiento antes que llegue el veterinario.
Lo primero es identificar las lesiones o condiciones que ponen en peligro la vida del animal, para poder actuar con oportunidad; contactar al médico veterinario lo antes posible; pedir ayuda si está solo; no hacer algo que ponga en peligro su seguridad; controlar la hemorragia en caso de existir; y, no medicar al animal si no es guiado por un médico veterinario.
Algunas condiciones consideradas de emergencia son: asfixia, heridas, bovino caído, diarrea, timpanismo, intoxicaciones y envenenamiento, problemas durante el parto, y prolapso uterino. (Lea: Aplique primeros auxilios en bovinos en alguno de estos casos)
La asfixia se presenta por causas como: obstrucción de vías respiratorias por cuerpo extraño, shock anafiláctico, inhalación de gases tóxicos, entre otras, por lo tanto es prioritario determinar rápidamente la causa, para poder ayudar al animal.
Cuando se presenta obstrucción por cuerpo extraño el animal está incómodo, presenta tos, extensión de la cabeza y cuello, dificultad para respirar y babea por la dificultad para tragar saliva. Puede presentar timpanismo por la dificultad para eructar.
Frente a ello se recomienda provocar la tos apretando con firmeza la tráquea, por debajo de donde se palpe el objeto, si éste no es palpable fácilmente, inicie presionando desde la parte más baja del cuello, hacia arriba, con el animal de lado o boca abajo. Normalmente éste lo expulsa si es un objeto pequeño.
El shock anafiláctico, entre tanto, es una situación ocasionada por una reacción del animal a algún medicamento, alimento, picadura de insectos o mordeduras de serpiente. Sólo se presenta en animales susceptibles. (Lea: Recomendaciones para evitar intoxicación bovina por consumo de sorgo forrajero)
En este caso es necesario aplicar 10 cc de adrenalina por vía intravenosa, para que obre inmediatamente. Si no se puede realizar vía intravenosa, se puede también aplicar intramuscular y repetir la dosis a los cinco minutos si el animal no muestra pronta mejoría.
El otro tipo de asfixia es por inhalación de gases tóxicos y se presenta cuando los animales están confinados o en áreas cerradas.
La medida de auxilio inmediata es sacar el animal afectado a un área ventilada.