El balance energético negativo (BEN) provoca variaciones en las concentraciones de glucosa y hormonas, las cuales se encuentran directamente relacionadas con el metabolismo de la energía y se manifiesta especialmente en el ganado de leche provocando hipoglicemia.
Iván Dario Cruz Zambrano, médico veterinario, miembro de la junta del Comité de Ganaderos de la Provincia de Sumapaz (Comigan Sumapaz) y Giovani Pinilla, médico veterinario, miembro de la Asociación de Ganaderos de Ubaté, aseguraron que la deficiencia de glucosa está relacionada directamente con la alimentación de la vaca.
La glucosa baja puede alterar el metabolismo del animal, convirtiéndolo en un animal muy poco activo, débil, y con ovarios inactivos.
Otros efectos que pueden presentar las vacas por la deficiencia son la baja producción, hígado esforzado, etc., y generalmente se da en animales de alta productividad lechera, aseguró Pinilla.
La deficiencia de glucosa en sangre es como la hipoglicemia que les da a los humanos y está relacionada con las dietas de baja calidad de las vacas, en las cuales las vacas se encuentran flacas, aseveró Cruz.
“Las vacas se quedan sin energías, al ocurrir esto ellas sacan reservas del hígado y producen con esto la cetosis. Con la escases de energía, movilizan grasas de otras partes del cuerpo generalmente del hígado hasta el punto en que se caen”, añadió Cruz.
La cetosis es una enfermedad que se deriva al desequilibrio de entrada y salida de glucosa en el sistema, dando baja concentración de sangre, conocido esto como hipoglicemia. (Lea: Enfermedad de cetosis puede generar pérdidas de USD 300 por vaca)
Todo esto se debe a la falta de energía que contienen los pastos o alimentos que se les suministra a los animales, los cuales concentran altos niveles de proteínas, pero escasos niveles de energía. Cabe resaltar que las vacas consumen demasiada energía para producir leche.
El diagnostico de esta debilidad o deficiencia se realiza mediante exámenes clínicos de laboratorio los cuales permiten reflejar escases de glucosa en el animal.
Cuando se toman exámenes de sangre, casi todas las vacas tienen problemas de glicemia. La hipoglicemia como la hiperglicemia se traduce en diabetes por bajos niveles de energía, sobre todo en vacas de alta producción, aseguró Cruz.
¿Cómo prevenir?
La escases de glucosa, como se mencionó anteriormente, tiene que ver con la alimentación de las vacas.
La prevención se basa en la buena suplementación de alimentos que deben tener las vacas en especial antes del parto con el fin de que no presenten ninguna alteración, indicó Pinilla. (Lea: Los ácidos grasos omega-3 y omega-6 ayudan en la reproducción bovina)
“Dependiendo del tipo y calidad de alimentación va a depender mucho de que la vaca tenga una muy buena lactancia, con un pico muy alto, sin bajar la condición corporal por toda la cantidad que tiene que producir porque ella entra en un balance energético negativo”, agregó.
El balance energético negativo (BEN) refiere al exceso de uso de energía que obtiene en la dieta, esto derivado de la mala nutrición energética.
Cuando el animal está muy bien alimentado, no va a sufrir de esta patología y por el contrario dará una muy buena producción de leche, además de tener una actividad ovárica temprana, aseveró Pinilla.
Tratamiento
Cuando las vacas se encuentran con debilidad de glucosa, se recomienda dar buen manejo de alimento. (Lea: Así se pueden prevenir las deficiencias nutricionales en temporada de preñez)
Adicional a esto, “las vacas que tienen algún tipo de padecimiento después del parto, generalmente para ayudarles se les coloca suplemento glucosado al 10 %. El cambio se nota inmediatamente, el animal tiene una mejor activación metabólica y estará mucho mejor”, mencionó Pinilla.
Cruz recomienda tener un buen cuidado de los animales, regularlo además mediante sales amónicas, concentrados amónicos, entre otros que permitan brindar buenos niveles de energías, con el fin de no presentar problemas adversos.
Para determinar la deficiencia o debilidad de glucosa, se recomienda consultar un experto para determinar el tratamiento adecuado según sea el caso.