El ecógrafo puede mostrar la presencia de patógenos dentro del útero, bacterias que van a producir descomposición del contenido uterino, detectar una patología como metritis, quistes foliculares y otras enfermedades reproductivas.
Así mismo ayuda a evidenciar la presencia de preñez, la viabilidad y el tiempo de la gestación, sexajes fetales, sincronización de celos, ovulación, el ciclo ovárico a nivel uterino, entre otros aspectos, indicó el médico veterinario José Hernán Pedreañez Ballesteros, en una nota de La Finca de Hoy.
Por su parte, Angelica Alejandra Mendoza Montoya, de la Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia de la Universidad Cooperativa de Colombia, recordó que, durante las últimas décadas, la ultrasonografía ha tenido gran impacto como herramienta utilizada en la evaluación reproductiva y en biotecnologías desarrolladas en bovinos, especialmente en programas de superovulación y transferencia de embriones.
También Pedreañez Ballesteros, indico que otras de las aplicaciones que tiene la ecografía son las de evaluar terneros y toros reproductores, visualizar latidos fetales, implantar y hacer seguimiento a técnicas de reproducción asistida como la inseminación artificial, transferencia de embriones y aspiración folicular. De esta mansera se ahorra tiempo y dinero puesto que, por ejemplo, una palpación de preñez solo debe realizarse 40 días después del procedimiento. (Lea en CONtexto ganadero: Por qué la ecografía aumenta la competitividad de una ganadería)
Tampoco habría que esperar edades reglamentarias para que la novilla inicie su vida reproductiva, bastaría con que alcance los 350 kilos de peso y un breve chequeo del aparato reproductivo a través del ecógrafo.
Otros beneficios
A su vez, Mendoza Montoya señala que la ecografía también es útil para la investigación de los animales con baja fertilidad debido a las anomalías cíclicas o a condiciones patológicas que afecta los ovarios y/o el útero. Las condiciones que afectan la fertilidad, tales como la enfermedad quística ovárica y la endometritis pueden ser identificadas con precisión y tratadas adecuadamente
La evaluación de la aptitud reproductiva del toro es un examen que permite identificar animales subfértiles e infértiles que pueden llegar a afectar el éxito de un programa reproductivo en una explotación pecuaria, ya que, como lo demuestran algunos estudios, aproximadamente entre el 3 y el 30 % de los toros utilizados no son del todo aptos para la reproducción, pues tienen una evaluación reproductiva no satisfactoria (infértil) o poco satisfactoria (subfértil)
La medición de la circunferencia escrotal y la altura testicular, son elementos de gran importancia en los procesos de selección de un toro, ya que el tamaño de los testículos ha sido asociado positivamente con la producción de espermatozoides. Es importante señalar que la palpación y la medida escrotal pueden proveer información importante para investigar la capacidad reproductiva, pero no pueden detectar enfermedades potenciales; por ello se debe complementar el examen con una evaluación mediante ultrasonografía, con el fin de determinar enfermedades focales y multifocales, como abscesos y quistes.
Igualmente, las mediciones con ultrasonografía de grasa de cadera, grasa dorsal y área de ojo de bife permiten seleccionar aquellos animales con mejor aptitud carnicera, mayor rendimiento de cortes y mayor rendimiento a la faena. (Lea en CONtexto ganadero: Ultrasonografía en hembras, ¿cómo se comporta y qué detecta?)
Uso adecuado
Técnicamente el ecógrafo es un equipo que produce ondas sonoras de alta frecuencia para representar en pantalla un tejido o un órgano interno del animal como ocurre en las radiografías de humanos, por lo que el procedimiento requiere de conocimientos previos.
Se debe tener un conocimiento del ciclo reproductivo de la vaca, de su anatomía, su fisiología, cómo se comporta el útero luego de haber cumplido su función de dar a luz una nueva cría. Con la practica el operario va logrando mayores habilidades en el manejo del ecógrafo. La técnica representa menos riesgos que la palpación. Un buen diagnóstico o un barrido completo del genital se puede demorar dos minutos, indicó Pedreañez Ballesteros.
A pesar de ser un método no invasivo se deben tomar algunas precauciones como aplicar el lubricante, usar guantes especiales, proteger la sonda con un guante, meter los animales con calma al brete, hacer una manipulación suave sin causarle estrés al animal.